La actividad industrial de Castilla-La Mancha se contrajo en 2016 en tasa interanual en un 4,3 por ciento respecto a 2015. Esta caída de la producción queda reflejada en el indicador que mide la evolución mensual de la actividad productiva de las industrias de Castilla-La Mancha. El Índice de Producción Industrial (IPI), que es como se denomina este indicador cerró en el 78,56. En 2015 el dato se situó en el 82,06.
La pérdida del valor añadido de nuestra industria no sólo quedó reflejada en la tasa interanual, (de diciembre de 2015 y diciembre de 2016), también en la tasa media, que mide la producción media de los doce meses del año y que en Castilla-La Mancha marcó una caída de 1,9 puntos.
Los datos son peores que los cosechados por el conjunto de la industria nacional, que se contrajo en tasa interanual un 1,9 por ciento, pero hecha la media del comportamiento durante todo el año, mejoró con un crecimiento de la producción del 1,6 por ciento.
Bienes de consumo y energía, los sectores con mayores caídas de producción
Los datos establecidos por el Instituto Nacional de Estadística que para obtención de los indicadores selecciona una cesta de productos o bienes representativos de toda la industria y un panel de establecimientos industriales que fabrican estos bienes que son los que facilitan los datos sobre las producciones mensuales realizadas. Los datos están ponderados en relación al año base que se toma de referencia que es el de 2010.
Los datos de enero de 2017, conocidos esta semana, marcan un repunte de la actividad de las industrias regionales del 2,1 por ciento en tasa interanual. Este dato mejora el registrado en enero de hace un año, en el que el crecimiento del valor añadido de nuestra producción industrial fue del 0,1 por ciento. Aún más, el índice de enero marca el regreso a tasas positivas tras seis meses en el que la actividad industrial se movió en signo negativo En España el crecimiento en enero fue del 7,1 por ciento, cinco puntos más que en Castilla-La Mancha, que fue la última Comunidad Autónoma en crecimiento de producción industrial.
Por sectores, durante 2016 sólo crecieron en Castilla-la Mancha el de bienes de equipo (maquinaria destinadas a la producción) y el de bienes intermedios (productos usados como recursos en la producción de otros bienes o como productos terminados: materias primas, combustibles, útiles de oficina…): El primero lo hizo un 5,6 por ciento y el segundo un 3,3.
En media anual, la producción del sector de bienes de equipo de nuestra región cerró en 2016 con un crecimiento del 0,8. Este dato es el peor de la evolución durante todo 2016. El de bienes intermedios lo hizo en un porcentaje del 2,8.
En enero de 2017 la producción volvió a valores positivos, tras seis meses en tasas negativas
En el resto de sectores de nuestra industria regional cayó el valor añadido. El que registró peores resultado fue el de bienes de consumo no duradero, con una pérdida del 10 por ciento interanual, seguido por el de bienes de consumo duradero (vida útil superior a un año), con una pérdida del 8,1 por ciento. En enero, los bienes de consumo crecieron un 3,7 y tiraron al alza con fuerza los de carácter durarero, que registraron una variación interanual del 22,7.
El sector de la energía registró una caída interanual del 7,7 por ciento. Este es el que peor resultado registra en media anual. La producción media se contrajo a lo largo de 2016 un 6,5 por ciento. En enero de 2017, la actividad del sector energético regional mantuvo su retroceso y cayó un 7,8 por ciento.
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