Según el Observatorio de INPROVO, cada castellano-manchego consume, de media, 130 huevos al año, a razón de 2,6 huevos a la semana. Esto supone un 13,3% menos que la media nacional, fijada en 150 huevos al año de media en 2020.
Si bien es cierto que, según los datos del estudio, el consumo de huevos se incrementó de manera generalizada en España durante el año de la pandemia. De esta forma, la media nacional se ha incrementado en un 17,1%, mientras que en Castilla-La Mancha el incremento fue del 12%.
El nivel de consumo de huevos en la región choca con el volumen de producción de los mismos. Pese a ser una de las regiones españolas con menor penetración del producto, Castilla-La Mancha es la principal productora de huevos del país. La región aglutina el 25% de la producción nacional de huevos, lo que hace de ella la principal Comunidad productora. Le siguen a buena distancia Castilla y León, que aporta el 16%, y Aragón con el 14%.

Precisamente en Guadalajara se localiza una de las principales empresas productoras y distribuidoras de huevos del país, la compañía alcarreña Dagu, que recientemente se ha fusionado con la catalana Ous Roig, creando el principal productor de huevos de España. Ambas compañías suman un parque de tres millones de gallinas ponedoras y más de 2,2 millones de metros cuadrados de terrenos e instalaciones productivas punteras.
Este comportamiento dispar entre producción y consumo en nuestra Comunidad responde, según señalan desde INPROVO, a razones culturales y de arraigo.
“El consumo de huevos en España tiene un fuerte arraigo cultural. Tradicionalmente en las regiones del norte, como el País Vasco, Navarra o Cantabria, el huevo ha tenido siempre una mayor presencia en la dieta, frente a otras zonas de centro y sur, como Extremadura, Castilla-La Mancha, Andalucía o Canarias, donde es inferior. Lo que sí que es destacable, es que en 2020 la penetración aumentó en todas las Comunidades Autónomas, superando el 98% de los hogares españoles. Estamos ante uno de los alimentos más completos, por sus propiedades nutricionales, su precio, accesibilidad y versatilidad, aspectos que están marcando las nuevas tendencias y hábitos alimentarios, por lo que esperamos que su consumo siga aumentando en España en los próximos años, hasta situarse en los 5 o 6 huevos semanales” señala María del Mar Fernández Poza, directora de INPROVO.