El hospital de Villarrobledo reduce sus tres listas de espera y los de Toledo y Cuenca las aumentan

A 30 de noviembre, y según los datos oficiales del propio Servicio de Salud de Castilla-La Mancha, 38.583 castellano-manchegos aguardaban ser intervenidos quirúrgicamente, 786 más (2,06%) que hace un año, otros 51.682 estaban pendientes de ser vistos en primera consulta, 3.709 más que un año antes (7,73%) y para someterse a una prueba diagnóstica había 7.591, un 1,03% menos que doce meses atrás.

Los hospitales de Almansa, Alcázar, Valdepeñas, Hellín y Puertollano son los que mejor evolución mensual presentan, con una reducción de las tres listas de espera. Empeoran su situación los de Talavera, Manzanares y Cuenca que, a pesar de rebajar la lista quirúrgica, ven incrementar las otras dos.

En términos anuales el hospital que peor evolución presenta es el de Cuenca, con fuertes crecimientos de sus tres listas, especialmente la de pruebas diagnósticas (155,6%) y la quirúrgica (42,8%). Sin embargo es otro hospital de capital de provincias, el de Ciudad Real el que se anota el peor dato anual en la lista quirúrgica duplicando la que existía en noviembre de 2018 (102,7%). El Complejo Hospitalario de Toledo, al igual que el de Cuenca ve incrementar todas sus listas de pacientes en espera, y de forma destacable la de primera consulta por un especialista, que crece un 20,1%. El único centro que ve mejorar sus tres listas es el de Villarrobledo, que reduce un 0,83% la quirúrgica, un 46,96% la de especialista y un 83,33% la de pruebas. Si en octubre, el de Villarrobledo estaba acompañado por los de Alcázar y Albacete en esa mejoría anual, en noviembre se queda en solitario.

En total de los 14 hospitales o complejos hospitalarios de la región 8 mejoran la lista quirúrgica, 6 la de consulta y otros 6 la de pruebas diagnósticas.

Otro de los hechos destacables de la situación a 30 de noviembre es que han aumentado el número de pacientes que superan en espera los plazos de garantías, de 180 días para una intervención quirúrgica y 60 para primera consulta mientras se han reducido el de pacientes que aguardan más de 30 días para pruebas diagnósticas.

De los 38.583 castellano-manchegos que aguardan una operación 15.180 lo hacen desde hace más de seis meses. El número se ha incrementado en 956 (6,72%) en los últimos doce meses. En el caso de las consultas, de los 51.682 pacientes, en espera, 11.996 llevan más de dos meses, son 3.864 más que hace un año (47,52%).

Por especialidades, las de traumatología y neurocirugía son las que presentan mayores tiempos medios de espera en cirugía, en algunos casos, como el de Toledo, por encima de los 220 días. En Alcázar los plazos de trauma superan los nueve meses. En el extremo opuesto, las cirugías vascular, torácica y dermatológica son las que menos demora tienen.

Por su parte el gobierno de Castilla-La Mancha destaca en su valoración el descenso registrado en los últimos cuatro años “en 36.227 pacientes, situándose al finalizar el pasado mes de noviembre, en 97.856 el número de pacientes pendientes de una intervención quirúrgica, una primera consulta con el especialista o la realización de una técnica diagnóstica. Según los datos del Portal de Transparencia del Servicio de Salud de Castilla-La Mancha, a los que puede acceder cualquier ciudadano, entre los meses de noviembre de los años 2015 y 2019, las listas de espera se han reducido un 27 por ciento”.