Crisis del COVID-19: Bimba y Lola, cierre y ERTE una semana después de alcanzar récord de ventas

2018 fue un año complicado para Bimba y Lola. La firma de moda gallega fracasó estrepitosamente en la búsqueda de un comprador debido al elevado precio de la operación (unos 450 millones de euros) y a la mala predisposición de las dueñas a ceder el control de la compañía, por lo que las hermanas Uxía se lanzaron a la conquista de los mercados internacionales.

Un año después, el balance del ejercicio 2019 confirma lo acertado de la decisión, que ha aupado las ventas de la compañía un 12,6%, hasta los 226,7 millones de euros.

Durante su proceso de expansión, Bimba y Lola ha logrado tener presencia en 18 países, tanto a través de tiendas físicas como a través de la tienda online y ha añadido 13 puntos de nuevos establecimiento a los 272 que ya tenía.

Ahora, la crisis del Covid-19 y el cierre decretado por el Gobierno de establecimientos comerciales que no sean de primera necesidad ha llevado a la compañía a anunciar un ERTE para todas sus tiendas de la Unión Europea. En total 206 establecimientos afectados y más de 800 empleados despedidos mientras dure el estado de alarma.

En Castilla-La Mancha la medida afectará a sus dos puntos de venta, uno en Albacete y otro en Toledo.