El gasto sanitario había provocado por sí sólo a finales de agosto una déficit de casi el 0,24 por ciento, descuadrando todas las cuentas del gobierno. Este agujero sube al 0,3 por ciento si se tiene en cuenta el gasto autorizado y todavía no reconocido como compromiso de pago. Ello motivó un duro aviso de la consejería de Hacienda y una reunión del consejero de Sanidad con los gerentes de su departamento para paralizar los gastos no comprometidos.
Se han cumplido los peores miedos expresados hace unos meses por el consejero de Hacienda y que publicó clm21.es, que se descontrolase el SESCAM. Y, a decir de los datos económicos, se ha descontrolado y lo ha hecho con fuerza. Ahora está por analizar si ha sido un problema en la gerencia o ha sido en las políticas expansivas puestas en marcha. En cualquier caso, la decisión ha sido tajante: se acabó el gasto en Sanidad hasta el año que viene, se terminó con las contrataciones de personal, con las compras de equipos y de material. Sólo se puede adquirir lo esencial.
Se recortan jornadas quirúrgicas, las guardias, las sustituciones de personal con Las contrataciones temporales…
La reacción no se ha hecho esperar. La presidenta del Grupo Parlamentario Popular en las Cortes de Castilla-La Mancha, Ana Guarinos, ha exigido a García-Page que “de manera urgente ponga freno a los recortes en sanidad. De lo contrario, asegura, aumentará más el colapso que sufre nuestro sistema sanitario regional desde que él es responsable regional”.
Una situación que ha llevado a la presidenta del Grupo Popular a afirmar que “esto sí que son recortes puros y duros en la Sanidad provocados por una nefasta gestión del Gobierno de Page, que ha estado y está más preocupado de sus intereses personales y de su partido en la calle Ferraz de Madrid que de atender las necesidades de salud de los castellano-manchegos”.
Lo cierto es que existe una fuerte preocupación en el gobierno por la situación creada por el caos en la gestión. Por un lado por la incidencia de la desviación del SESCAM en las cuentas públicas y, desde el prisma político, porque el descontrol pone en entredicho una de las líneas maestras de la acción de gobierno: la mejora de los servicios sanitarios.
El PP exige al Gobierno de García-Page que “de de manera urgente ponga freno a los recortes en sanidad”
El mensaje desde Hacienda a Sanidad, muy claro y radical: hay que cortar la sangría y frenar todos los gastos posibles, y el primero el de las contrataciones temporales. Todo ello, a pesar de que el gasto de personal se mantiene en un nivel adecuado a estas alturas del año. Esa decisión se plasmó por escrito en una resolución que fue remitida a las gerencias y que fue destapada por el Partido Popular en el debate del estado de la región. Una denuncia de la que se han hecho eco los medios de comunicación. Tras las denunciadas realizadas por el PP en el debate por estas instrucciones dadas por el gobierno autonómico a las gerencias sanitarias para acabar con la contratación de personal, este frenazo se produce precisamente en pleno proceso de la oferta pública de empleo que el ejecutivo considera uno de los ejes de su política para mejorar la sanidad, una ampliación de plantilla que supondrá un gasto no inferior a los 35 millones de euros anuales.
El origen del problema está en el déficit provocado por la gestión del principal programa de gasto de la Comunidad Autónoma, el de “Atención integrada a la salud”, cuyo presupuesto inicial ascendía a 2.423 millones de euros, el 28,77 por ciento de los 8.420 millones que conforman el total del presupuesto de la Junta de Comunidades. A lo largo del año, el programa se redujo a 2.390 millones. A falta de conocerse los datos de finales de septiembre, los de agosto ya contabilizaban una desviación de casi 90 millones de euros en el segundo cuatrimestre entre el gasto comprometido y el presupuesto definitivo de ese programa. En concreto son 89,94 millones, pero el temor es que ese descuadre se incremente porque hay partidas en ejecución que suman otros 17 millones de euros que todavía no se han contabilizado como gasto reconocido, pero sí autorizado.
La principal partida que ha provocado la desviación ha sido la del gasto farmacéutico
De esos 33 millones de recorte que ha sufrido el programa de atención sanitaria, tras la diferencia de créditos al alza y a la baja, la mayor parte se aminoran en los fondos destinados a pagar las recetas. Ese recorte ha provocado a su vez una necesidad de fondos para atender a los pagos a las oficinas de farmacia equivalente a los fondos detraídos, unos 37 millones de euros.
Las cifras, según la oposición popular, ponen en evidencia la gestión sanitaria que ha hecho el gobierno y hacen temer por la repercusión que pueda tener sobre los pacientes y sobre las listas de espera. Precisamente fue el portavoz del Partido Popular, Francisco Cañizares, el que hizo pública en la tribuna la resolución que la gerente del Servicio de Salud de Castilla-La Mancha había enviado a las diferentes gerencias para que no llevaran a cabo nuevas contrataciones temporales evidenciando “que una cosa es lo que se hace y otra lo que se dice”.
El Partido Popular viene denunciando los incumplimientos del gobierno en materia sanitaria y el deterioro de las listas de espera. Fue uno de los ejes principales de su crítica al presidente García-Page durante el debate del estado de la Región.
La congelación de contrataciones se solapa en el tiempo con los anuncios gubernamentales de la oferta pública de empleo sanitario
Por su parte, la presidenta del Grupo Popular, Ana Guarinos, ponía como ejemplo del caos la situación de Guadalajara: “La propia gerencia del Hospital de Guadalajara, por ejemplo, no tiene empacho en reconocer que desde el gobierno de Page se les ha solicitado que hagan los recortes necesarios en personal, recortando las jornadas quirúrgicas y reduciendo la cobertura de las Incapacidades Temporales. También han confirmado que se van a recortar las Guardias de los residentes a 4 en lugar de 6 y reconocen, además, que los refuerzos de verano no se van a prorrogar”.
Podemos también ha hecho pública su preocupación por las consecuencias que la medida pueda tener sobre la calidad de la atención sanitaria que reciban los pacientes. “Nuestro servicio de salud –señala el comunicado- sufre una persistente escasez de profesionales. Tras los recortes de los últimos años, y no habiendo cubierto las vacantes que se producen ni sustituido las bajas, inevitablemente se han limitado las prestaciones y se ha reducido la calidad de la atención”.
Podemos, cuyo secretario general, García Molina, ha recibido la llamada del presidente García-Page para tratar de que la formación morada, preocupada por el rescate ciudadano, ponga en marcha el rescate del gobierno, ya ha advertido que en un contexto que según la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha, es de “recuperación, crecimiento y consolidación”, no entiende esta medida, que tampoco resulta compatible con lo reivindicado recientemente por el Presidente Emiliano García-Page en las Cortes regionales. Además, la instrucción dada por la Directora Gerente del SESCAM supone el reconocimiento de una insuficiencia financiera del servicio de salud, también muy preocupante. “Esta falta de fondos denota un importante fallo de planificación. La forma de solucionar el problema, la prohibición tajante de contratación a unos colectivos profesionales y la ausencia de medida alguna para otros, indica una completa desorientación e incapacidad para identificar las necesidades del servicio de salud de todos y todas”.
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