La destrucción de empleo en el sector de la hostelería y el turismo de la Comunidad se produce en términos de afiliaciones a la Seguridad Social. El dato contrasta con el hecho de que, en el tejido productivo regional, el año pasado se produjo una subida de 3.836 cotizantes (0,5%) en comparación con 2019.
Uno de cada tres autónomos que se dieron de baja del sistema pertenecen al sector hotelero y hostelero. En concreto, 2020 cerró con 13.132 trabajadores por cuenta propia en estas actividades frente a los 13.498 de un año antes. Son 366 menos. En total el número de autónomos de la economía regional descendió durante 2020 en 1.100.
En cuanto a los asalariados, el sector cerró 2020 con 28.449 frente a los 36.008 contabilizados de diciembre de 2019.
En el escenario nacional, Castilla-La Mancha (16%) es la séptima Comunidad que más empleo destruye en el sector turístico, que se ha visto especialmente afectado en Aragón (19,4%), Andalucía (19%), Canarias (18,5%), La Rioja (16,7%), Murcia (16,6%) y Baleares (16,5%). En términos de asalariados, la Comunidad pierde el 21% de los afiliados en estas actividades. El porcentaje sólo es sobrepasado por Aragón (24,5&), Andalucía (24,1%), Baleares (21,5%) y La Rioja (21,1%).