En 2020 nuestra Comunidad recibió como entregas a cuenta para su financiación por el Estado 5.055 millones de euros. Tras el primer balance del Ministerio de Hacienda a partir del comportamiento que realmente tuvieron los tributos en ese año, la financiación que le hubiese tocado sería de 4.705 millones de euros.
Las entregas a cuenta se calcularon y se empezaron a librar antes del comienzo de la pandemia y se mantuvieron a pesar de la caída de la recaudación por el impacto en la actividad económica y en el consuno. Las previsiones de Hacienda es que las quince autonomías de régimen común habrían recibido 2.487 millones más de lo que realmente les correspondería en función de los impuestos recaudados. Sólo Baleares (537,9 millones), Canarias (282,7 millones) y la Comunidad Valenciana (595,42) presentan unos saldo positivos y recibirán esas cantidades este año como compensación a una infrafinanciación en 2020.
En el balance de nuestra Comunidad, la Hacienda Autonómica habría ingresado a cuenta 24 millones menos por IRPF, 94 por el Fondo de Convergencia y 6,75 millones por el impuesto especial sobre el tabaco.
Sin embargo, en el resto de las figuras fiscales y de los fondos del modelo de financiación, Castilla-La Mancha habría tenido entregas a cuenta superiores de las que les corresponden en función del comportamiento fiscal en 2020. Los mayores impactos de la pandemia en la financiación de nuestra Comunidad fueron en el IVA (255 millones de euros), en los impuestos cedidos (313,76 millones de euros) en el fondo de garantía de los servicios públicos (127 millones de euros, el 10% del total) y en el impuesto que grava los hidrocarburos (79 millones de euros).
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