El presidente adelantó que estos nuevos tributos temporales a las entidades financieras y las grandes compañías energéticas podrían recaudar aproximadamente unos 7.000 millones de euros en dos años y que busca frenar los "beneficios caídos del cielo" que son "sobrebeneficios" que salen del "bolsillo del contribuyente".
"Ahora carga contra unos supuestos beneficios empresariales. Estos impuestos no son algo que contribuya a disminuir el alza de precios, muchas lo trasladarán a sus precios", ha asegurado Garrido en una entrevista en Telemadrid, recogida por Europa Press. Para él no se debería "andar regando con dinero público" a los ciudadanos sino que el Estado se "apriete el cinturón" porque está "recaudando y gastando más que nunca".
Ve "especialmente grave" la tasa a la banca porque es "una empresa que tiene que lograr beneficios" y que se están perfilando las medidas ante una subida de tipos, como ya ha hecho EEUU, cuando llevan años en tipos 0. "Ya está bien de demonizar. Esa justificación de criminalizar los beneficios empresariales", ha lanzado CEIM.
Asimismo, ha censurado que estas medidas "dificultan la seguridad jurídica" y lastran las inversiones para reformar, por ejemplo, las compañías del mercado eléctrico. Cree que se debería optar por rebajar las cotizaciones para fomentar el empleo y "facilitar oxígeno a las pymes".
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