En el último año, las ventas de los comercios de Castilla-La Mancha crecieron 4 por ciento (un 2,4 por ciento descontados los efectos de la inflación), según los datos a 30 de junio. La media nacional se situó en el 4,2 por ciento (2,8% deflactado). Este empuje de las ventas se ha dejado sentir en las contrataciones. En el conjunto de España han crecido en ese periodo en el 2,2 por ciento. En nuestra Comunidad, que ocupa el último puesto autonómico junto a Cantabria, el empleo en el comercio minorista ha crecido el 0,8 por ciento.
En nuestra Comunidad, el primer semestre del año se está mostrando más dinámico para las ventas que el segundo semestre del año pasado, sin embargo, la contratación de personal se ha ralentizado en los primeros seis meses de este año, donde ha crecido un 0,5 por ciento. Durante los seis primeros meses, el crecimiento de ventas ha sido del 5% (1,6% deflactado).
En los dos últimos años, desde junio de 2015, el crecimiento registrado en el índice de venta a nivel nacional es de 7,325 puntos. En Castilla-la Mancha en ese mismo periodo, el índice de ventas ha crecido 6,164. Las ventas también se presentan más dinámicas en los últimos 12 meses (4%) que en los doce meses inmediatamente anteriores (2,7%).
En lo que llevamos de año, el mes en el que más crecieron las ventas en tasa interanual fue marzo, donde el comercio registró unos resultados superiores en un 13 por ciento respecto a marzo de 2016. Le sigue junio con un incremento del 3,7 por ciento y mayo, del 2,8 por ciento. Los peores meses para los comerciantes castellano-manchegos durante 2017 ha sido febrero, donde la caída de ventas fue del 13,4 por ciento respecto al mismo mes de 2016; enero con un retroceso del 11,9 por ciento y abril en el que las ventas cayeron un 2,7 por ciento.
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