Entre enero y marzo, los ingresos de Vestas sumaron 2.829 millones de euros, un 13,8% más, mientras que el resultado bruto de explotación (Ebitda) fue de 2062 millones, tras un resultado negativo de 585 millones en el primer trimestre de 2022.
"Vestas ha tenido un buen comienzo en 2023 (...) En comparación con 2022, nuestra rentabilidad en el primer trimestre de 2023 se vio impactada positivamente por la venta de nuestro negocio de convertidores, menores provisiones de garantía y una sólida rentabilidad en Servicios", destacó Henrik Andersen, presidente y consejero delegado de Vestas.
De cara al conjunto del ejercicio, la compañía espera alcanzar unos ingresos de entre 14.000 y 5.500 millones de euros. Asimismo, la compañía ahora prevé realizar inversiones de alrededor de 1.000 millones de euros en 2023.
"La industria eólica sigue desafiada por la incertidumbre política, los lentos procesos de permisos y la alta inflación, que esperamos que continúe a lo largo de 2023, pero vamos por buen camino para nuestra perspectiva financiera de 2023", añadió Andersen.
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