En un comunicado, ha indicado que si bien en el primer semestre de 2023 crecieron las exportaciones en valor un 4,7% respecto al mismo periodo del año anterior, hasta alcanzar los 199.951,2 millones de euros, apunta a que este aumento fue debido a un incremento de los precios del 7,1%, ya que en volumen se redujeron un 2,2% interanual.
"Estos datos pueden ser el preludio de una importante ralentización del crecimiento económico de España. La demanda extranjera por nuestros productos se ha reducido y la demanda española de productos extranjeros también se ha reducido, incluso más", señala el Club.
Como dato positivo, el Club de Exportadores destaca la reducción del déficit en el saldo comercial, que bajó hasta los 16.420 millones de euros, cuando había sido de 31.963,2 millones que en el mismo periodo de 2022.
También ve remarcable que la tasa de cobertura se haya situado en el 92,4%, es decir, 6,8 puntos porcentuales más que la registrada en enero-junio de 2022 (85,7%).
No obstante, indica que la dependencia energética de España es la que produce el déficit en el intercambio comercial, ya que el saldo no energético arrojó un superávit de 284,5 millones de euros, frente al déficit de 6.069,4 millones en el mismo periodo de 2022, mientras que el déficit energético se redujo hasta los 16.7049 millones (déficit de 25.893,9 millones en el mismo periodo del año anterior).
Por áreas geográficas, el Club de Exportadores destaca las exportaciones españolas de bienes que crecieron "a un mayor ritmo en comparación con las registradas por países de su entorno", como Alemania (3,2%) e Italia (4,1%). Y crecen también por encima de las de Estados Unidos (-0,8%), Japón (3,1%) e incluso las de China (3,7%).
REDUCCIÓN DE LA ACTIVIDAD POR LA INCERTIDUMBRE Y LOS TIPOS DE INTERÉS
Asimismo, el Club de Exportadores e Inversores expresa en un comunicado su preocupación por el hecho de que el Producto Interior Bruto (PIB) de muchos países o decrece o no está creciendo, a lo que se une la incertidumbre y el incremento de los tipos de interés, que provocan una reducción de la actividad económica en buena parte del mundo.
Por tanto, la organización recuerda la necesidad de adoptar medidas de apoyo empresarial que aporten estabilidad y certidumbre, reduzcan la presión fiscal sobre las empresas e incentiven la inversión.
Asimismo, recomienda aumentar la base exportadora española, ya que indica que "es preocupante que en el primer semestre de este año el número de exportadores regulares ha caído en un 7,3%, lo que se añade al descenso del 3,2% que se produjo en el 2022".
"Necesitamos más empresas medianas y grandes, cuya propensión a exportar es muy superior. Es un riesgo importante para nuestra economía que, desde hace 25 años, el 67% de las exportaciones estén concentradas en tan solo 1.000 empresas", analiza.
Y concluye instando a que se "refuercen los sistemas de inteligencia en las empresas y las administraciones con el objetivo de anticiparse a posibles situaciones de riesgo".
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