Más de un año de espera para un holter cardiaco (monitor de pequeño tamaño que hace una lectura continua de la frecuencia y el ritmo del corazón), de cuatro a cinco meses para realizar un ecocardiograma (medición del corazón mediante ultrasonidos), una tomografía o una endoscopia del aparato digestivo…Son algunos de los plazos y de la casuística que revelan las listas de espera de los hospitales públicos de la Comunidad Autónoma para someterse a una prueba diagnóstica.
El centro con mayor lista de espera es el complejo de Toledo
Si bien, hay que señalar que el número de pacientes en esta lista es menor que el que figura en las relaciones de los que esperan una intervención quirúrgica (42.159) o ser atendido por un especialista (75.670). En concreto, a finales de marzo, 12.537 castellano-manchegos estaban pendientes de que se les realizasen pruebas para poder diagnosticar sus enfermedades o el alcance de las mismas.
Algunas de estas pruebas médicas tienen un plazo medio superior a los cien días. Algunos de los datos estadísticos contrastan por su disparidad, porque a igual número de pacientes citados para el mismo tipo de prueba, el tiempo de espera es mayor en unos hospitales que en otros, lo que, a juicio de algunos gestores, evidencia un desajuste en la aplicación de los recursos técnicos y humanos y en la planificación por parte del servicio regional de salud.
Casi la mitad de la lista de espera de pruebas diagnóstica de nuestra Comunidad son ecografías. En concreto hay 5.613 personas aguardando la fecha en la que deben acudir a los ecógrafos. Otros 2.253 están pendientes de que se les realice una endoscopia digestiva, 1.205 de someterse a una resonancia magnética, 977 a una tomografía computerizada, 626 a un ecocardiograma y 616 a una radiografía simple.
Estos son algunos de los datos desagregados del estudio sobre la situación de la sanidad pública de Castilla-La Mancha, del que les viene informando clm21.es.
En el análisis por centros hospitalarios, no existe un factor común. De hecho, hay hospitales de poblaciones intermedias que, como Tomelloso, tienen 483 personas pendientes de una ecografía, cuando en la vecina Villarrobledo, sólo se contabilizaba un único paciente para someterse a la misma prueba.
Tomelloso es el quinto hospital, de los 14 conjuntos asistenciales de la Región, con peor registro de número de pacientes en lista de espera. En concreto, las personas en esta situación son 1.391.
El centro hospitalario más saturado es el de Toledo, que tiene 2.071 pacientes aguardando una prueba de diagnóstico, Le siguen por este orden, el de Guadalajara, con 1.897 pacientes, el “Mancha Centro” de Alcázar de San Juan, con 1,615 y el de Puertollano con 1.409. Los nueve restantes están por debajo de mil personas en lista de espera.
En el caso de Toledo, el atasco se produce el servicio de ecografía, que acumula 1.130 pacientes. En el caso de Puertollano, es la ciudad con más pacientes pendientes de someterse a una tomografía, 297. Esta cifra contrasta con la de otros hospitales, como el de Toledo o el de Hellín, donde sólo una persona en cada caso estaba pendientes de una tomografía.
El hospital con los tiempos de espera más reducidos es el de Manzanares. Su lista es de 315 pacientes, de los que tan sólo 13 deben aguardar un plazo superior a treinta días para ser atendidos. El grueso tiene cita para un periodo inferior a quince días.
5.613 personas pendientes de una ecografía; 2.253 esperando una endoscopia y 1.205 una resonancia magnética
En el lado opuesto se encuentran Alcázar, Puertollano, Valdepeñas, Ciudad Real, Talavera, Tomellosos y Guadalajara, en los que la mayoría de los pacientes tienen que esperar más de un mes para una prueba diagnóstica. Así en Guadalajara se encuentran en esta situación 1.091 de los 1.897 pacientes en lista de espera. En el caso de las resonancias magnéticas la demora en este hospital es de tres meses. En Tomelloso, 889 de las 1.391 citas tienen un plazo superior al mes. En este hospital hay dos pacientes pendientes de que se les aplique un holter cardiaco. La espera media para la prueba es de 383 fías, o lo que es lo mismo un año y dieciocho días. En Talavera, 311 de los 494 pacientes tienen cita con plazo superior al mes.
Los datos revelan también la disparidad entre hospitales. Así los 9 pacientes que están pendientes de que se les realice un electroencefalograma en Cuenca tienen un tiempo medio de espera de 5,11 días. El mismo número de personas para la misma prueba en Ciudad Real deben esperar de promedio 27,22 días,es decir cinco veces más. En Talavera, los 11 pacientes en lista para un ecocardiograma tienen que aguardar una media de 47,27 días. A igual número, en Valdepeñas, la demora es sólo de 3,45 días.
En Guadalajara, las cinco personas que esperan un holter tienen un plazo de 9,6 días. En Albacete, el mismo número de personas debe esperar 67,6 días. Y el mencionado caso de Tomelloso, donde dos pacientes tienen un plazo medio de espera de 383 días.
En el cuadro anexo, se pueden constatar la situación de cada hospital, con el detalle del número de pacientes y el tiempo medio de espera para cada una de las pruebas diagnósticas. En el próximo reportaje daremos cuenta de la situación de la lista de espera para consulta de especialistas.
El gobierno ha presupuestado para 2016 tres millones setecientos mil euros para realizar pruebas diagnosticas en concierto con centros privados. La mayor cuantía se destina a resonancia magnética, con un capítulo de 2,5 millones. Le sigue l a medicina nuclear con 600 mil euros y radiologías especiales con 200 mil euros. Para endoscopias, una de las pruebas con mayor lista de espera de la comunidad, el gobierno ha consignado 15 mil euros.
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