Claves, Economía | Incumple la “regla de gasto” al final del primer semestre
La Junta pone en riesgo la estabilidad financiera al incrementar el gasto más del doble del límite legal
miércoles 19 de septiembre de 2018, 21:08h
Castilla-La Mancha cerró el primer semestre con un incremento del gasto del 5,8%, el segundo mayor de las Comunidades Autónomas tras Baleares, que lo hizo en un 11,6%. Las Comunidades Autónomas no pueden superar un incremento del gasto del 2,4%, según los criterios aprobados por las Cortes. Este dato se une al fuerte deterioro de las cuentas públicas del gobierno regional, que a final del primer semestre era del 13,1% en saldo presupuestario y del 18,27% del saldo primario (las partidas en las que tiene capacidad de actuación la administración).
Efectivamente un estudio detallado de la contabilidad regional y del déficit de 448 millones alcanzado por Castilla-La Mancha al final del primer semestre -del que ya dio cuenta clm21.es- se debe fundamentalmente a las partidas sobre las que tiene de margen de actuación la administración. Es lo que los economistas conocen como déficit primario y resulta de descontar los intereses pagados por los endeudamientos que tiene la Junta.
En los seis primeros meses los intereses devengados han ascendido a 92 millones, por lo que, descontado su efecto, el déficit primario de la Junta es de 356 millones de euros. A final del primer semestre del año pasado el déficit primario era de 301 millones de euros. Esto supone que las cuentas públicas sobre las que tiene capacidad presentan un saldo deficitario del 18,27%.
La escalada del déficit de la región tanto sobre su saldo total como su saldo primario contrasta con una mejora de las cuentas del conjunto de las Comunidades Autónomas del 15,7%, al haber reducido sus necesidades de financiación en 1.330 millones de euros .
Los ingresos (recursos no financieros) de la Junta crecen un 5,4% en 158 millones de euros. este crecimiento es inferior en dos décimas al que tienen el conjunto de las regiones españolas. Los gastos lo hacen en cambio en un 6,4% (200 millones de euros respecto a 2017).
En el capítulo de ingresos no se produce variación por las cuantías vía impuestos de un año. La Hacienda regional obtuvo por esta vía 799 millones de euros. A pesar de ese crecimiento cero, sí se dio una variación en la procedencia de los fondos. Cayeron los de renta y patrimonio y crecieron los que tienen su origen en las operaciones que gravan la producción y las importaciones (fundamentalmente por el impuesto sobre transmisiones patrimoniales y actos jurídicos documentados). También crece en un 6,2% los ingresos por de transferencias entre administraciones, fundamentalmente las procedentes del Estado por el sistema de financiación. Finalmente los ingresos por otros recursos entre los que destacan los fondos europeos se incrementan en 40 millones, un 24% respecto al pasado año.
En cuanto al capítulo de gastos que crece por encima de los ingresos. Una de las mayores subidas en términos absolutos se la anota la remuneración de los empleados públicos que crece en 48 millones de euros (2,8% en términos relativos). La causa está en la introducción y recuperación de determinados complementos retributivos y la subida general del 1% en las retribuciones, realizada con efectos retroactivos en el segundo semestre de 2017 y con un gran peso específico en el diferencial interanual apreciado en esta primera parte de 2018.
Los 92 millones de euros pagados en intereses pagados por la deuda representan una reducción de 3 millones de euros respecto al año pasado. El gasto en subvenciones ha pasado de los 48 millones a los 60.
La partida que engloba el farmacéutico, las derivaciones sanitarias y los servicios sociales crece en 32 millones hasta los 530. Y una de las partidas que más crece es la de formación bruta de capital fijo, que pasa de 98 a 130 millones de euros.
Por último, en lo relativo al gasto computable a efectos del cálculo de la regla de gasto, la variación interanual máxima en el presente ejercicio está establecida en el 2,4%. El informe emitido por la Intervención General del Estado destaca que en el caso de Castilla-La Mancha, la segunda con mayor porcentaje de incumplimiento, se debe a los gastos no financiero que suponen un incremento inicial del 6,4%, “sin que los mayores importes registrados en los gastos no computables determinen un disminución sustancial en su gasto computable final”.
Hasta el mes de junio de 2018, tan sólo cinco Comunidades sobrepasan dicho umbral: Aragón, Baleares, Cantabria, Castilla-La Mancha y Valencia.