Hasta en quince ocasiones nombró a su rival política. Era un encuentro a micrófono cerrado del presidente García Page con los medios de comunicación de la Región con motivo del primer a aniversario de su mandato. En la rueda de prensa posterior, ya a micrófono abierto, María Dolores Cospedal volvió a estar en el relato del presiente otras tantas ocasiones. Y es que aunque el presidente trató de hacer balance de un año de gestión y de mirar al futuro, el subconsciente le pudo y se refirió en numerosas ocasiones a la herencia recibida, aunque sólo empleó ese término dos veces, y la tomó como referencia comparativa. A una pregunta sobre si veía a Cospedal como ministra, Page señaló que siendo secretaria general debería aspirar a la vicepresidencia del Gobierno. Dicen que va a Educación. No es igual una cartera que otra. “Si la nombran el mismo día le pediré hablar sobre esta tierra”.
Enumeró planes y proyectos sin una cuantificación económica
Hizo García Page un relato sobre la base de la documentación que le habían aportado sus consejeros, tanto a pasado como a futuro. Un repaso mucho más completo que el dossier “1 año, 800 acciones” que se entregó a los periodistas. En cuanto a las de los doce últimos meses, aunque trató de contener un tono triunfal, trasladó la imagen de que con su llegada al gobierno se habían empezado a solucionar todos los males. Por lo que respecta al futuro, enumeró un catálogo ambicioso de planes y proyectos, sin una cuantificación económica que los hiciera realistas y viables. Las fichas de los diferentes departamentos no habían pasado el filtro de Hacienda. A este respecto, García-Page se mostró como firme defensor del rigor presupuestario: “Los presupuestos van a cumplir con los mecanismos y la legalidad de estabilidad. Pero eso no significa que vayamos a hacer el tonto. Vamos a ser disciplinados y vamos a exigir esa disciplina a los demás”.
Como buen analista y comunicador, lo mejor de sus intervenciones tanto en abierto como off the record, fueron algunas frases del diagnóstico que hace de este año: “Hemos cambiado el pulso vital a la Región”, “se ha acabado con la soberbia política”, “hemos tenido que recomponer la situación y hemos acabado con la tensión, el odio y el rencor social, que se instauraron con la llegada del Gobierno anterior”, “hemos recuperado la agenda regional”. Habló del orgullo de pertenencia y de haber recuperado ese sentimiento. Hizo un buen alegato contra las crisis financieras y su causantes y lamentó que sólo se haya trabajado para atajar y paliar sus consecuencias y no para erradicar sus causas a fin de evitar que se pueda volver a producir.
Dijo que va a ofrecer a Podemos llegar más allá en los acuerdos que firmaron en la investidura, que no pediría al PP un apoyo para la estabilidad. Afirmó que el PP no puede plantear un día que el PSOE es el diablo y al día siguiente proponer una gran coalición. Anticipó que su postura es no a la investidura de Rajoy y les hizo una recomendación a los líderes del PP de Castilla-La Mancha: sobra el ataque por el ataque, el no permanente y el insulto. Y anticipó que sí desea entenderse con el PP de Castilla-La Mancha en temas esenciales para la Región.
Eludió responder sobre si el futuro del PSOE pasa por Pedro Sánchez
Menos explícito fue al abordar la situación interna y el futuro del PSOE-PSCM. Dijo que no es incompatible ser presidente o presidenta de una comunidad Autónoma y Secretario/a general del partido. Anticipó que en los próximos meses tendrá que hablar en muchas ocasiones en clave nacional, porque han de abordarse muchos temas nacionales que afectan a las Comunidades Autónomas. También eludió responder abiertamente a la pregunta de clm21.es sobre si el futuro del PSOE pasa por Pedro Sánchez, aunque dijo que el secretario general cuenta con su apoyo.
Por último dijo que el peor momento en este tiempo ha sido el cese de la consejera de Educación. Dijo que no prevé nuevos cambios, que no le gustan “Los cambios inerciales de los que yo he sido objeto”.
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