El comercio minorista se desploma en abril con el 46% de las empresas cerradas al público

Se trata de un desplome histórico de las ventas al por menor y que viene a sumarse a la caída de un 14,3% interanual registrado en marzo, como consecuencia de los primeros días del estado de alarma.

Las ventas de las empresas cuya actividad principal es el comercio al por menor por correspondencia o internet ha aumentado un 52,9% respecto al mismo mes del año anterior.

En relación a marzo, donde los establecimientos permanecieron abiertos la mitad del mes, todos los comercios han reducido sus ventas en abril. La mayor bajada, del 60,1%, se ha producido en aquellos que venden vestido y calzado.

Por el contrario, la situación de confinamiento de los hogares ha provocado que los productos alimenticios hayan sido los bienes con mayor volumen de ventas. Aun así, han descendido un 8,6%, tras la subida mensual del 8,4% en marzo.

Según recoge el Instituto Nacional de Estadística, durante el estado de alarma los consumidores han realizado preferentemente sus compras de alimentación en Grandes Cadenas (sus ventas crecen un 9,1% en tasa anual) y Grandes superficies (6,1%), en detrimento de las Empresas unilocalizadas y Pequeñas cadenas, cuyas ventas bajaron un 16,9% y un 8,2%, respectivamente.

Las ventas bajan en tasa anual en todas las Comunidades Autónomas en abril.

Sin embargo, Por su parte, Galicia (-23,4%), Castilla-La Mancha (-26,2%) y País Vasco (-27,2%) son las regiones que menos han visto disminuir las ventas minoristas en abril.

El empleo del sector resiste gracias a los ERTES

En cuanto a la ocupación del sector, el efecto del estado de alarma sobre el empleo en el comercio al por menor se ha visto diluido por la posibilidad de las empresas de acogerse a un Expediente de Regulación Temporal de Empleo (ERTE), en el que su personal sigue formando parte de la empresa. A nivel nacional ha bajado un 2,0% en tasa anual.

El empleo del comercio minorista disminuyó en abril en todas las Comunidades Autónomas en tasa anual. Las mayores bajadas se dan en Baleares (-6,3%) y Canarias (-3,4%). En Castilla-La Mancha la tasa de ocupación del sector descendió un 2,4%.