El gobierno pretende dar rango legal a un nuevo sistema de gestión sanitaria para controlar costes, en el que prevalece la vertiente economicista y de los gestores sobre la de atención al paciente y las garantías sanitarias. El sistema se fundamenta en la fórmula de contratos-programa del Servicio de Salud de Castilla-La Mancha con las respectivas gerencias hospitalarias, que hoy tienen naturaleza pública. Este sistema permite en una segunda etapa encomendar las gerencias a empresas o fundaciones públicas, privadas o mixtas.
El ejecutivo prioriza la eficiencia en la gestión económica sobre las garantías sanitarias de los pacientes
Efectivamente, el anteproyecto de ley de presupuestos para 2017 incluye en su artículo 24 un nuevo sistema de gestión sanitaria. En concreto, ese artículo regula por primera vez el régimen presupuestario del Servicio de Salud de Castilla-La Mancha, partiendo no de las necesidades de la atención sanitaria de la población, sino de la gestión económico-administrativa. El artículo introduce por primera vez en la ley de presupuestos los contratos-programas del SESCAM con cada una de sus gerencias en los que dice “se fijarán sus directrices de actuación, los objetivos a alcanzar y los recursos que se asignen para ello”. Este sistema, que incorpora a la sanidad pública sistemas de gestión y administración que se usan en el sector privado, priorizan los resultados económicos sobre las garantías de los pacientes.
El contrato programa es un modelo de gestión basado no en los pacientes, sino en las relaciones organizativas y financieras. Se introdujo por primera vez en el sistema sanitario español en 1994, buscando la eficiencia económica como prioritaria, por encima de la eficiencia sanitaria. Este sistema pensado inicialmente para garantizar la suficiencia del sistema, se basaba en su origen en que toda la organización se ponía al servicio de los profesionales. En algunas Comunidades Autónomas supuso introducir la gestión privadas de los hospitales a través de fundaciones, lo que motivó una fuerte contestación desde el Partido Socialista.
Sin embargo, es ahora el Partido Socialista en Castilla-La Mancha el que apuesta por introducir la gestión privada en muchos servicios de la administración a través de fundaciones públicas o mixtas y a través de encomiendas de gestión con empresas y fundaciones. En el caso de la Sanidad, el modelo que introduce por primera vez los presupuestos de 2017 establece el contrato entre el SESCAM y sus gerencias hospitalarias, o lo que es lo mismo del SECAM consigo mismo. Las gerencias hospitalarias en estos momentos tienen naturaleza pública, pero el Gobierno abre la puerta a que, en un futuro, esas gerencias puedan ser privadas.
El contrato programa formaliza un marco de relaciones en el que se concretan los compromisos y las contrapartidas de las partes y en el que se incluye el sistema de seguimiento y evaluación del cumplimiento de las cláusulas establecidas y su sistema de revisión, a lo largo de un plazo de tiempo determinado.
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