Esta nueva dinámica económica en la compraventa de viviendas tiene mucho que ver con el cambio de hábitos que nos ha impuesto la pandemia. Más tiempo en casa y una mayor capacidad de ahorro de las familias durante la época de las mayores restricciones y el confinamiento han sido el detonante para que muchos españoles se lancen al mercado en busca de su hogar ideal, que ahora también tiene nuevas características post-covid: terrazas, jardines, espacios abiertos, y luz en casas unifamiliares priman sobre los clásicos pisos urbanitas.
La mayoría de capitales de provincia españolas tiene ahora menos viviendas en venta de las que había antes de la pandemia. Entre 2019 y 2021, la reducción es del 40% en Teruel y supera el 30% en Santander (-35%), Pamplona (-32%), Zaragoza (-30%) y Cuenca (-30%). Les siguen los descensos de Salamanca (-27%), Melilla (-27%), Guadalajara (-26%) y Segovia (-25%).
De hecho, todas las capitales de Castilla-La Mancha muestran un fuerte descenso del stock de vivienda disponible en los últimos dos años, a excepción de Ciudad Real, que ha incrementado la oferta en un 1%. Albacete y Toledo, por su parte, registran descensos del stock del 21 y del 18 por ciento respectivamente.
Si analizamos la variación únicamente a lo largo del 2021, Santander lidera el ranking de pérdida de oferta de casas con una caída del 28%. Le siguen Teruel (-27%), Soria (-27%), Zaragoza (-26%), Cuenca (-25%), Pamplona y Albacete (-23% en ambos casos).
Huesca, Guadalajara y Toledo lideran la pérdida de stock provincial
A nivel provincial, la situación ha sido similar desde el inicio de la pandemia. Huesca, Guadalajara y Toledo lideran la pérdida de stock (con un descenso de 33% en las tres provincias), seguidas por Zaragoza y Navarra (con un 30% de caída en ambos casos). Las mayores subidas, en cambio, se han producido en Jaén (23%), Alicante (22%) y Cáceres (20%).
El ranking de las caídas en el último año lo lideran las provincias aragonesas de Huesca (-27%) y Zaragoza (-23%). Les siguen Guipúzcoa, Guadalajara y Cuenca (con un -19% en las tres provincias), Cantabria (-18%), Albacete y Navarra (-17% en ambos casos). Alicante, por el contrario, ha experimentado la mayor subida (22%), seguido por Málaga (13%) y Santa Cruz de Tenerife (9%).