El peor balance entre ingresos y gastos en el primer trimestre del año se debe a una aceleración del gasto en un porcentaje próximo al dos por ciento (1,93%), mientras que la recaudación de la Hacienda Regional sólo ha crecido un 0,34% respecto al mismo periodo del año pasado.
A finales de marzo, el gobierno había reconocido obligaciones de pago por un total de 1.433,4 millones de euros de los 7.609,7 que conforman el presupuesto de gastos no financieros. En paralelo, la Hacienda regional había ingresado 1.327,3 millones de euros, registrándose una caída en la recaudación por impuestos directos del 5,60% y del 82,58% en los ingresos patrimoniales.
Cae la recaudación de ingresos por los tributos propios que gestiona la Junta y aumentan los ingresos por IVA
Los impuestos directos suponen la tercera partida en cuanto a volumen de ingresos en el presupuesto de la Junta de Comunidades, que prevé recaudar este año por este concepto 1.282 millones de euros. La mayor cuantía corresponde al tramo autonómico del IRPF, por el que Castilla-La Mancha recibe el 50% de lo que se recauda por este impuesto. Por este concepto en el primer trimestre el gobierno regional ha recaudado 273 millones de euros, 9,5 menos que en el mismo periodo del año pasado. Pero en porcentaje el mayor descenso se ha registrado en los tributos de gestión propia del gobierno regional. Si en el primer trimestre de 2017 se habían recaudado por el impuesto de sucesiones 15,4 millones de euros, en igual periodo de 2018, sólo se ha llegado a los 9,3. Otro tanto ocurre en el impuesto de donaciones, por el que el año pasado ya se habían ingresado a finales de marzo 2,4 millones de euros y este año sólo 1,16 millones.
Además la caída de los ingresos también afecta a otros impuestos cedidos y que están vinculados a la actividad mercantil. Así por el gravamen de las transmisiones patrimoniales se ha ingresado 1 millón menos que el año pasado. La misma cuantía se ha reducido la recaudación por actos jurídicos documentados. Por operaciones societarias en los tres primeros meses de 2017 se recaudaron 318.000 euros. En 2018 apenas si llegaba a los 85.000 euros.
El descenso en la recaudación de los tributos propios y en otros que reflejan la renta y la actividad mercantil, ha sido compensado fundamentalmente por el incremento de la recaudación por IVA, que ha sido de 354 millones de euros, 20 millones de euros más que un año antes. Otro de los ingresos con un buen mejor comportamiento que el año pasado es el que se produce por el impuesto sobre los hidrocarburos.