09/11/2021@21:16:51
La infrafinanciación del actual sistema, la inflación, el regreso a la disciplina fiscal europea y el crecimiento económico por debajo de las previsiones forman un peligroso cóctel que amenaza la sostenibilidad financiera de las Comunidades Autónomas, especialmente de aquellas más endeudadas (Valencia, Castilla-La Mancha, Murcia, Cataluña, Baleares y Extremadura) o con mayores déficits de financiación (Valencia, Castilla-La Mancha, Andalucía o Canarias). El escenario es el que ha urgido a las regiones a reclamar ya un nuevo modelo de financiación que sustituya al que se aprobó en 2009 y que está prorrogado desde su vencimiento en 2014. Castilla-La Mancha sufre ya con fuerza la presión. Su presupuesto para 2022 se contrae al crecer por debajo de la inflación, todo ello a pesar de aumentar el gasto a costa de disparar el déficit y la deuda, que ya es elevada entre otras cuestiones por la infrafinanciación de 1.250 millones de euros anuales que padece la región.