Según los datos de Eurostat, la escalada de los precios de la zona euro en diciembre responde a la subida interanual del 4,6% del coste de los alimentos frescos, frente al 1,9% del mes anterior, mientras que la subida del precio de la energía se moderó al 26% desde el 27,5% de noviembre.
A su vez, los precios industriales no energéticos aumentaron en diciembre medio punto porcentual más que en noviembre, hasta el 2,9% interanual, mientras que los servicios se encarecieron un 2,4%, tres décimas menos que el mes anterior.
Al excluir del cálculo el impacto de la energía, la tasa de inflación interanual de la zona euro subió al 2,8% desde el 2,5% del mes anterior, mientras que al dejar fuera también el efecto de los precios de los alimentos frescos, el alcohol y el tabaco, la tasa de inflación subyacente se mantuvo en el 2,6%, repitiendo por segundo mes consecutivo la lectura más alta de toda la serie histórica.
Entre los países de la eurozona, las mayores subidas interanuales de los precios correspondieron en diciembre a Estonia (12%), por delante de Lituania (10,7%) y Letonia (7,7%), mientras que los incrementos más moderados se registraron en Malta (2,6%), Portugal (2,8%) y Finlandia (3,2%).
En el caso de España, la tasa de inflación armonizada se situó en noviembre en el 6,7%, lo que implica un diferencial de precios desfavorable respecto de la zona euro de 1,7 puntos porcentuales, frente a las seis décimas del mes de noviembre.