Gestamp, multinacional especializada en el diseño, desarrollo y fabricación de componentes metálicos de alta ingeniería para la industria de la automoción, es una de las compañías familiares con mayor volumen de facturación del mundo. Con presencia en 24 países y una filial con sede en Seseña (Toledo), es un referente económico en España y en Castilla-La Mancha, donde durante varios años se ha posicionado como una de las empresas más top de la provincia de Toledo.
Pese al recorte de los beneficios, la compañía mantiene sus objetivos marcados para el año, centrados en preservar la rentabilidad y la generación de caja. En este sentido, sí que ha experimentado un incremento de las ventas en el primer trimestre, alcanzando un crecimiento de ingresos del 7% interanual hasta alcanzar 2.256 millones de euros. Este incremento incluye también el traspaso a precio de la subida de materias primas como ya había anticipado el grupo.
Este crecimiento en ventas ha permitido a Gestamp superar nuevamente al mercado en 12.6 puntos porcentuales a tipo de cambio constante en un sector que ha sufrido especialmente por el impacto de las disrupciones en las cadenas de suministro en los volúmenes de producción de vehículos.
Este primer trimestre también se ha caracterizado por un incremento de costes a nivel global resultado de las tensiones geopolíticas. En este contexto, Gestamp ya refleja en sus tarifas las subidas del coste de la electricidad y la energía, así como el encarecimiento de las materias primas. Además, el grupo se encuentra inmerso en la negociación con sus principales clientes para subir los precios como consecuencia de la inflación y su repercusión en los salarios.
Gestamp cuenta con más de 100 plantas de producción, 13 centros de I+D y una plantilla de cerca de 40.000 empleados en todo el mundo. Su facturación en 2021 fue de 8.093 millones de euros.