Con el presupuesto prorrogado, el gobierno de Castilla-la Mancha ha reducido en más de un punto los fondos para inversiones productivas, propias o a través de tercero desde que se inició la legislatura. En concreto, las operaciones de capital han pasado del 8,8 por ciento de los gastos no financieros en 2015 al 7,7 en 2017.
En millones, los fondos de capital han disminuido en los dos últimos años en 62,6 millones de euros en términos absolutos (el 10,25 por ciento), a pesar de que el presupuesto global no financiero se ha incrementado en 169,4 millones (2,44 por ciento) en ese periodo.
Esa tijera a la inversión en infraestructura de los servicios públicos ha provocado que, a pesar de aumentar el presupuesto total de la Comunidad Autónoma en 169,39 millones de euros, los fondos destinados a mejorar las instalaciones y el equipamiento públicos y a impulsar las del sector privado se han reducido en 62,6 millones de euros.
Los datos están reflejados en las ejecuciones presupuestarias al mes de abril de los últimos años. En 2016 y 2017 a esa fecha se trabajaba con presupuestos prorrogados de los ejercicios inmediatamente anteriores.
Las inversiones productivas tienen un fuerte tirón en el empleo y en la generación de riqueza. La Fundación de Estudios de Economía Aplicada advertía que la caída de la inversión en los servicios públicos que están llevando a cabo las Comunidades Autónomas amenaza con deteriorar los mismos.
Los datos de la ejecución revelan en concreto que la inversión propia de la Junta de Comunidades en sanidad, educación y resto de los servicios públicos se ha reducido de 167,75 millones en 2015 a 149,95 millones en 2017. Esa caída de 17,8 millones de euros supone una reducción de más del 10 por ciento en tan sólo dos años.
Las ayudas a la inversión de ayuntamientos y empresas, públicas y privadas, se ha reducido en 44,8 millones de euros en este bienio, al haber pasado de 443,18 millones a 398,78 (un 10,11 por ciento menos).
El proyecto de ley que el gobierno presentó para este año y que no sacó adelante en su tramitación parlamentaria incrementaba los fondos para operaciones de capital en 25,65 millones. Pero mantenía ese dinero para inversiones propias y subvencionadas en un porcentaje inferior a las de 2015. En concreto las operaciones de capital representaban el 8,62 por ciento de los fondos de actuación del gobierno. En 2015, alcanzaron el 8,8.
Los datos hasta abril revelan que el ejecutivo, no sólo ha reducido las inversiones, también que gestiona los proyectos con mayor lentitud. En concreto a finales de abril de este año, el ejecutivo había gestionado el 8,89 por ciento de las operaciones de capital, que engloban inversiones propias y ayudas a la inversión, frente al 12,22 por ciento de igual periodo en 2015.
La Junta había financiado obra propia o ajena por 48,75 millones de euros (el 8,89% de lo presupuestado), cuando dos años antes la cifra se situó en 74,63 millones de euros (el 12,22% de lo previsto).
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