En menos de 24 horas dos personas que entienden la política preguntan por la misma mujer. Uno es un veterano socialista con experiencia en gestión tanto en el gobierno como en el partido. Otro es un periodista con criterio. Los dos hablan en clave de sucesión.
Ella es Isabel Rodríguez, ciudadrealeña, miembro de la dirección del Grupo Socialista en el Congreso de los Diputados. 36 años recién cumplidos. Licenciada en Derecho, ha sido senadora y, al igual que García-Page fue portavoz del Gobierno regional; ella en la última legislatura de José María Barreda. Es lista, con agilidad mental y le quiere la cámara. Es una de las socialistas habituales en los telediarios. Estuvo en la primera etapa de Pedro Sánchez, colaborando de cerca con el. Tras el golpe de los barones se alejó del que fue su jefe. Ahora Sánchez le ha tendido la mano y la ha mantenido en la dirección del Grupo Parlamentario como secretaria adjunta. Su obsesión -dice ella- es no perder el norte. Y el norte puede ser en clave regional.
En el socialismo oficial -el regional, claro- no quieren oír hablar del tema. Dicen que andamos perdidos. Lo cierto es que lo que hasta hace unas semanas era impensable ahora centra las conversaciones: quién puede ser el sustituto de García-Page en el partido… y como cabeza de cartel. Y la esencia es esa: el qué.
Algunos critican su ineficacia y su falta de gestión. Le reconocen que tiene mucha suerte, aunque dicen que en las tareas de gobierno eso ayuda, pero no es suficiente. Con la sanidad hecha unos zorros llega Amancio Ortega y dona varios millones para tecnología hospitalaria; con la economía a menor crecimiento que la nacional, llega una empresa francesa y empieza a montar un parque temático. Con el dinero contado para cultura, esta misma semana llega un mecenas y dona 7.000 obras de arte. Ninguna de las tres actuaciones obedece a una iniciativa del Gobierno o su presidente.
Ha pasado otra semana y el gobierno no negocia el presupuesto. El presidente calla sobre este tema. El consejero de Hacienda ya lo dijo: me remito a lo que día el presidente. Y el presidente calla. Ha pedido que le calculen los tiempos que lleva la tramitación parlamentaria del presupuesto para elegir la fecha de presentación, para que la solución pueda tomarla en la última quincena de agosto.
La semana comenzó con una información en el telediario nacional en la que se decía que, junto a Canarias y Cataluña, Castilla-La Mancha tenía las mayores listas de espera. El Gobierno dijo que eso iba a mejorar. De hecho, ya ha hecho uso de las derivaciones masivas a la sanidad privada para la realización de intervenciones quirúrgicas.
Y la semana termina con un uno de esos amigos que se tiene en política -un conseguidor- con problemas judiciales, con un caso en el que interviene el FBI y la SEC, el regulador bursátil de Estados Unidos. El amigo es Mauricio Casals. El juez le ha imputado dentro de la operación Hanta que estudia el desvío de ayudas publicas. Los investigadores le señalan como el presunto ‘conseguidor’ de créditos blandos del Ministerio de Industria para proyectos de I+D de una empresa y el posterior desvío de cerca de 2 millones a La Razón con falsos acuerdos de publicidad.
Dicen que la culpa de esa amistad fue de Antonio Cañizares -el cardenal, claro- y de José Luis Rodríguez Zapatero. Fue hace cinco años, en junio de 2012, en Ávila en un debate entre ambos. Estaba moderado por Francisco Marhuenda, director de La Razón. Acudieron 1.500 personas. Entre ellas, Emiliano García-Page -entonces alcalde de Toledo-. Había mucha gente de la política y de la iglesia. Y en ese escenario destacaba el Príncipe de las Tinieblas, el apodo del diablo con el que se conoce a Mauricio Casals, presidente de La Razón y vicepresidente de Atresmedia.
Un año después un periodista de Castilla-La Mancha, en su diario digital escribía “…pero Casals tiene otro gran amigo en la región. Se llama Emiliano García-Page. La hemeroteca de La Razón no engaña. La sombra del Príncipe de las Tinieblas es alargada” era septiembre de 2013.
Lo cierto es que Casals es un hombre de negocios, al que le viene muy bien eso de mandar en un periódico y en un grupo multimedia. Le abre muchas puertas y le ofrece muchas posibilidades en sus otros negocios. Una de las líneas de los bussines tiene que ver con las empresas privadas de Sanidad.
Si (
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