Detrás del gran incremento de la tasa anual del IPC en Castilla-La Mancha está, principalmente, el encarecimiento de alimentos y bebidas no alcohólicas, la cesta de la compra, que se incrementaron en un 5,2% en tasa anual en la región. Este mismo comportamiento se puede observar en el conjunto del país aunque en menor medida, donde el precio de los alimentos y bebidas no alcohólicas amplió en abril su avance interanual al 4,7%, cuatro décimas más que en marzo, debido, en su mayor parte, a la subida de los precios de las frutas y de las legumbres y hortalizas.
Por otro lado, en Castilla-La Mancha destaca también el incremento de precios de hoteles y restaurantes, que se anotan una subida del 4,9% en tasa anual, frente a la bajada de precios de este mismo grupo en el conjunto del país, por el abaratamiento de los paquetes turísticos, que el año pasado subieron en abril por la celebración de la Semana Santa. Lo mismo ocurrió con el grupo de hoteles, cafés y restaurantes, que rebajó su tasa anual siete décimas en abril de este año, hasta el 4,8%, por el descenso de los precios de servicios de alojamiento.
Por último, tiene un gran peso sobre el incremento de la tasa anual del IPC en la región el grupo económico de vivienda, agua, electricidad, gas y otros combustibles que se incrementaron en un 4,5% como consecuencia del encarecimiento del gas, frente a la bajada que experimentó en abril del año pasado. También, aunque en menor medida, influyeron los precios de la electricidad, que descendieron menos que en abril de 2023, tras la subida del IVA de la luz.
El aceite, lo que más se encarece
En tasa interanual (abril de 2024 sobre el mismo mes de 2023), lo que más ha subido de precio es el aceite de oliva (+68,1%), que acumula un repunte del 204,8% desde enero de 2021, lo que significa que su coste se ha triplicado en los últimos tres años.
En abril destacaron también las subidas interanuales de los precios de los zumos de frutas y vegetales (+17,3%), de las frutas (+17,1%), del transporte marítimo de pasajeros (+16,8%) y de las cuotas de suscripciones a canales de televisión (+15,4%).
Por contra, lo que más se abarató en el cuarto mes del año en relación a abril de 2023 fueron los otros aceites (-18,8%); los equipos de telefonía móvil (-10,8%); los vuelos internacionales (-8,6%); los ordenadores personales (-7,2%) y la pizza (-6,5%).
Sin tener en cuenta las rebajas y variaciones en impuestos, el IPC interanual alcanzó en abril el 2,7%, seis décimas por debajo de la tasa general del 3,3%. Así lo refleja el IPC a impuestos constantes que el INE también publica en el marco de esta estadística.
En el cuarto mes del año, el Índice de Precios de Consumo Armonizado (IPCA) situó su tasa interanual en el 3,4%, una décima más que en marzo. Por su parte, la variación mensual del IPCA fue del 0,6%.
El IPC por comunidades autónomas
En cuanto al comportamiento del IPC en el país, este registró tasas anuales positivas en todas las comunidades autónomas en abril. Galicia presentó la más elevada (3,7%), seguida de Baleares (3,6%) y Castilla-La Mancha (3,6%), mientras que la Comunidad Foral de Navarra registró la más baja (2,9%).
La subyacente, por debajo del IPC general
La inflación subyacente (sin alimentos no elaborados ni productos energéticos) bajó cuatro décimas en abril, hasta el 2,9%, tasa cuatro décimas inferior al IPC general y su tasa más baja desde enero de 2022. Es, además, la primera vez en casi dos años en que la inflación subyacente se sitúa por debajo de la tasa general de IPC. En concreto, no se daba esta situación desde noviembre de 2022.
Con la subida de abril, en términos mensuales, la inflación en Castilla-La Mancha aumentó un 0,8%, mientras que en lo que va de año la subida llega al 1,9%.
Por su parte, en términos nacionales, con el avance del IPC interanual en el cuarto mes del año, la inflación encadena dos meses consecutivos de ascensos después de las cuatro décimas en las que subió en marzo. El repunte de abril sitúa la inflación muy cerca de los niveles con los que arrancó el ejercicio (3,4%).
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