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La Junta no varía el escenario económico regional por la inestabilidad catalana en los presupuestos de 2018
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La Junta no varía el escenario económico regional por la inestabilidad catalana en los presupuestos de 2018

martes 24 de octubre de 2017, 13:47h

El gobierno de Castilla-La Mancha no cree que la inestabilidad de Cataluña vaya a repercutir en el marco presupuestario de nuestra Comunidad. Por ello no lo ha modificado y ha presentado el presupuesto regional para 2018 siguiendo ese marco elaborado en agosto, antes de que se desestabilizara la situación política y económica de Cataluña. El proyecto de presupuestos, aprobado hoy por el ejecutivo de García-Page, contempla un gasto de 9.219,1 millones de euros, de los que 7.609,7 se destinarán a gastos en servicios y el resto a gastos financieros. El titular de Hacienda, Juan Alfonso Ruiz Molina, estima que el proyecto permitirá cumplir al gobierno regional por primera vez en la legislatura con el objetivo de déficit (0,4% del PIB), además de cumplir con el límite de endeudamiento del 35,3% del PIB y el 2,4% de la regla del gasto.

Fuentes del propio gobierno consideran que, si bien a corto plaza esa inestabilidad no es para tenerla en cuenta, un empeoramiento de la situación terminaría por afectar a todas las economías regionales. En la actualidad, el ejecutivo castellano-manchego contempla que la economía regional crecerá un 2,6 por ciento en 2018 y el PIB alcanzará los 41.354,44 millones de euros. En las cuentas públicas el ejecutivo mantiene que el 44,13 por ciento de sus ingresos procederán de impuestos (ligados a la actividad económica) y tasas.

El presupuesto para el año que viene mantiene la misma línea que los de 2016 y 2017, porque el gobierno está convencido de que dinamiza la economía y el empleo, mejora los servicios sociales que presta la administración autonómica y garantizan la solvencia financiera y la eficiencia del gasto público.

El gasto no financiero para 2018 crece respecto a 2017 en un 2,7. En las previsiones, Hacienda contempla que las consejerías de Agricultura (0,8%), Sanidad (2,14%) y la propia Hacienda (0,7%) tendrán un incremento por debajo de ese porcentaje.

El gobierno aprueba el proyecto de ley que contempla un gasto de 9.219,1 millones de euros

De los 9.219,1 millones de euros, el gobierno destinará más de la tercera parte, en concreto 3.120,3 millones al pago del personal. La segunda gran partida es la destinada a subvenciones corrientes, que alcanza los 2.448,4 millones. Los siguientes pagos en importancia son los de vencimientos de créditos, que suman 1.606 millones de euros, seguidos por la compra de bienes corrientes y de servicios que suman 1.191,6. Los gastos en inversiones productivas se incrementaran un 1,2%, por debajo de la inflación, lo que supone una caída real de este gasto. El consejero ha justificado la situación porque se reducen los fondos finalistas procedentes de las administraciones nacional y europea y ha puesto en valor que el gobierno incrementa Las inversiones con fondos propios en un 12 por ciento.

Por políticas de gasto, Sanidad tendrá un presupuesto de 2.771 millones de euros, Educación 1.698,8, Agricultura 1.407,6 y servicios sociales 727,4 millones. El desarrollo económico y el empleo contarán con 275,5 millones , las infraestructuras, el urbanismo y vivienda con 259,3, el funcionamiento de los servicios generales de la administración con 150,6 y la investigación, desarrollo e innovación y las nuevas tecnologías con 111 millones.

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