Tampoco saca pecho el equipo de Economía. Los indicadores que se van publicando tienen más sombras que luces. En los dos primeros meses del año el paro se ha disparado. Somos la segunda región española donde más ha crecido. Andan en los programas públicos de empleo que palían la situación de forma temporal para tratar de frenar el impacto. Y andan de feria en feria e intentando insuflar optimismo a los empresarios, que llevan cuatro trimestres anclados en el pesimismo, viendo que sus expectativas sobre sus negocios se reducen y que finalmente los resultados confirman ese estado de ánimo. Malos, pues, los indicadores para trabajadores y empresarios. Y peor para las trabajadoras, que la diferencia entre el paro masculino y femenino en Castilla-La Mancha es la mayor de España. Queda un profundo trabajo por hacer en materia de igualdad en esta tierra. Los gestos -siempre buenos- deben ir acompañados de medidas efectivas. Oye y ya se sabe que el Presupuesto de Castilla-La Mancha, que suma 9.219 millones, dedica 18 millones al programa de “Promoción de la mujer”. No llega al 0,2%.
Y en materia de comunicación destacan dos apuntes. El primero la dureza de algunas declaraciones desde el gobierno y sus apoyos parlamentarios contra los dirigentes del PP, ya sean en ruedas de prensa o en intervenciones públicas. La segunda ese intento de enredar y de tratar de generar la sensación de que el PP carece de líder para las próximas autonómicas, y van y dicen que si Catalá, que si Tirado, que si Cañizares… Pero siguen hablando mal de Cospedal…
A estas alturas los grandes manejan encuestas y al presidente no le dan. Y eso después de tres años de gobierno y de haber contado con más de 26.400 millones de euros para hacer políticas. En la de los conservadores, no le da. En la de los socialistas, tampoco. En una y otra no aparece Podemos y sí Ciudadanos. Anda el presidente tratando de vender a empresarios y prescriptores que puede gobernar con Ciudadanos, que está dispuesto a cambiar morados por naranjas en la próxima legislatura. Flaco favor hace a los de Rivera y poca seguridad transmite en sí y en sus actuaciones. A lo dicho… Puede terminar en Europa.
¿Y Josele qué opina de esto? Leal hasta que le llegue su momento. Caballero ha mejorado mucho su perfil y cuida su imagen, incluso con el PP. Es una de las excepciones en la política española de hoy y se desmarca de ese perfil agresivo que tanto abunda en la política actual. Una política en la que hay en puestos clave muchos dirigentes que se formaron en las organizaciones juveniles de sus respectivas formaciones, que ya se sabe que son más combativas, que tienen la sangre más desbordada y más inquieta y el lenguaje encendido y menos diplomático. Es algo que se deja sentir en el clima político. Que si Rafael Hernando (portavoz en el Congreso), que si Puigdemont (expresidente de Cataluña), que si Adriana Lastra (vicesecretaria general del PSOE), que si Marta Pascal (coordinadora del PDeCat). En algunos casos, bastantes, son pocas o esporádicas las actividades que se les conocen fuera de la política, en la que se han profesionalizado (no es el caso del expresidente catalán). A lo dicho, Caballero, ya ha superado esa etapa. En ese grupo está el presidente de Castilla-La Mancha y parte de los directivos de su área de comunicación -los duros, los que no terminan de asimilar que en el gobierno y en su presupuesto no rigen los criterios de las juventudes-. Por cierto dicen que para este año, el último de las elecciones, el presupuesto para publicidad ya no va a ser de 4 millones de euros, sube a 7,5.
En el Consejo de Gobierno de la semana ha quedado patente la intención del ejecutivo de regular el mecenazgo y, de paso, tratar de cubrir algunos vacíos legales que tenían las donaciones de empresas a la Junta. En ese terreno, la cosa pinta muy endeble. Todo apunta a follón. Para empezar porque hay tres años sin el suficiente paraguas jurídico. Algunos empresarios trasladaron cierta incomodidad al ejecutivo. A partir de ahora las donaciones llevarán aparejadas unas bonificaciones en la fiscalidad autonómica.
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