Economía
| Adiós a repostar tal y como lo hacemos ahora
La gasolina 95, la gasolina 98 y el diésel serán historia a partir de octubre
lunes 23 de julio de 2018, 12:17h
A partir del próximo 12 de octubre repostar combustible no volverá a ser lo mismo. Con la nueva normativa impuesta desde la Unión Europea desaparece la nomenclatura tradicional del combustible, que pasará a ser mucho más específica. Este cambio se introduce con la idea de ayudar a los consumidores a seleccionar el combustible apropiado para sus vehículos en toda Europa, evitar equivocaciones a la hora de repostar y, en definitiva, implantar un sistema más homogéneo.
La nueva norma afectará a los vehículos adquiridos a partir de la fecha de puesta en marcha del nuevo sistema, por lo que estos coches deberán disponer de una pegatina con las nuevas identificaciones del combustible. Los fabricantes de vehículos no recomiendan colocar las etiquetas en vehículos más antiguos.
Pero el mayor cambio se producirá en las gasolineras, que deberán cambiar todas las denominaciones de los combustibles. Así, la gasolina 95, la gasolina 98 y el gasóleo o diésel dejarán de existir y en su lugar habrá etiquetas que deberán estar colocadas en los surtidores de gasolina, gasóleo, hidrógeno (H2), gas natural comprimido, gas natural licuado y gas licuado de petróleo de las estaciones de servicio de acceso público de todos los países de la Unión Europea.
Para adaptarse a la nueva regulación, se prevé que los fabricantes de vehículos y las estaciones de servicio comenzarán a introducir estas etiquetas con antelación a la fecha límite.
Diez etiquetas para diez variedades de combustible
En cuanto a la nueva nomenclatura del sistema europeo de etiquetas, tendrá diseños específicos de etiquetas para cada tipo de combustible: gasolina, gasóleo y combustibles gaseosos.
La etiqueta utilizada para la gasolina es un círculo, donde la “E” designa los biocomponentes específicos presentes en la gasolina, con tres variedades posibles.
La etiqueta utilizada para el gasóleo es un cuadrado, donde la “B” designa los componentes específicos de biodiésel presentes en el gasóleo, mientras que “XTL” significa diésel sintético, es decir, que no deriva del crudo de petróleo. Dentro del diésel hay también tres subvariedades.
Por último, la etiqueta correspondiente a los combustibles gaseosos está representada por un rombo y serán 4 las variedades posibles, dependiendo de la composición del gas.
Las nuevas etiquetas se implementarán en los 28 Estados miembros de la Unión Europea, los países del EEE (Islandia, Liechtenstein y Noruega) y también en Macedonia, Serbia, Suiza y Turquía.
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