La reforma tributaria llevada a cabo por el gobierno regional, que ha supuesto un incremento de la presión fiscal a familias y empresas de la Comunidad, no se ha traducido en una mayor recaudación. El ejecutivo no ha alcanzado los ingresos esperados con los tributos de su competencia, según revelan los datos de la ejecución presupuestaria a 30 de octubre. A falta de dos meses para terminar el año, el gobierno sólo había ingresado 257,20 millones de euros, el 58,94 por ciento de los 436,38 millones presupuestados para el año. En algunos impuestos como el de donaciones, la Junta de Comunidades no llegaba al 40 por ciento de sus previsiones. Las estimaciones sitúan los ingresos a final de año por debajo del 75 por ciento, lo que supondría un déficit de entre 110 y 135 millones de euros.
Con la subida impositiva y la mejora de la gestión, el gobierno tenía previsto recaudar 125 millones más que los ingresados en 2015 y se quedará en cuantías similares a las del año pasado
De hecho, tres meses después de aprobada la reforma tributaria, ya se encendían las luces rojas. La recaudación a 30 de junio de 2016 era menor que la registrada en la misma fecha del año anterior, en la que se produjo el traspaso de poderes desde el gobierno del Partido Popular y que el PSOE consideró excesivamente baja. Esta consideración motivó una dura crítica del actual consejero de Hacienda a su antecesor, en una intervención parlamentaria en la que presentó el informe a 30 de junio de 2015 sobre la situación económico-financiera que se había encontrado el actual ejecutivo socialista. Un discurso que estuvo apoyado en un documento de 17 páginas de cuadros elaborados por la Intervención General de la Junta de Comunidades.
A finales de junio pasado habían entrado en las arcas de la comunidad autónoma en concepto de los impuestos autonómicos 500.000 euros menos que un año antes, lo que suponía una caída de ingresos de 2,57 puntos (el 6,7 por ciento), a pesar del aumento de la presión fiscal llevada a cabo por el Partido Socialista con el apoyo de Podemos y que entró en vigor el 1 de junio. Las subidas más importantes fueron de un punto en el impuesto de transmisiones patrimoniales, que pasó del 8 por ciento al 9, y de cuarto de punto en el de actos jurídicos documentados, que pasó del 1,25 por ciento al 1,50.
A finales de octubre sólo había ingresado por impuestos autonómicos el 59% de la presupuestado
“No estamos hablando –decía Ruiz Molina a propósitos de los ingresos en el primer semestre de 2015- de que se esté recaudando el 50 %, ni siquiera el 40 %, que era la media de ejecución del resto de los capítulos, sino de porcentajes mucho más reducidos, como ocurre en el impuesto sobre donaciones, con el 27,8 por ciento, o actos jurídicos documentados, que con 120 millones, tan sólo se han reconocido derechos por importe de 22,5. Es decir, una ejecución media de los tributos cedidos de gestión propia del 38,17 %.”
En el primer semestre de 2016, en el que se hizo efectivo el aumento de la presión fiscal en el último mes, esa ejecución media se situó en el 35,6 por ciento, es decir 2,57 puntos por debajo que un año antes. El impuesto de donaciones tenía un estado de ejecución del 23,21 por ciento, 4,68 puntos inferior al dato que motivó su crítica hace un año, el de transmisiones patrimoniales, el que más dinero aporta a las arcas de la Comunidad, presentaba una ejecución inferior en 8,46 puntos y el de donaciones había caído un 11,8 por ciento.
Estos resultados vuelven contra el actual consejero las duras palabras que pronunció para criticar la gestión de su antecesor, Arturo Romaní: “En relación con el presupuesto de ingresos existen dos factores que justifican esta mala recaudación. En primer lugar, un problema de gestión tributaria… Y, por otra parte, el segundo factor, es que hay una sobrepresupuestación. Es decir, han inflado ustedes el presupuesto de ingresos”, hecho que catalogó como grave.
A 30 de junio los resultados de ingresos por impuestos propios eran inferiores en un 6,7 por ciento al mismo periodo del año anterior, cuando se produjo la transmisión de poder
El gobierno de García-Page incrementó las previsiones de ingresos para 2016 en 28 millones de euros. Dado que no infló las cuantías a recaudar para no caer en lo que había criticado al Partido Popular, la reforma tributaria y la mejoría de la gestión deberían aportar a las arcas de la Comunidad 125 millones adicionales a los recaudados en 2015. Sin embargo, el estado de ingresos a 30 de octubre hace prever que a finales de año la Hacienda autonómica, habiendo aumentado los impuestos a empresas y familias, tendrá unos ingresos por tributos propios similares a las de 2015.
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