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Tienda Tino González
Tienda Tino González

Tres tiendas de la región sobreviven al concurso de acreedores de Tino González

viernes 07 de julio de 2017, 09:36h
La marca de calzado low cost Tino González comienza a ver la luz al final del túnel y se prepara para despedirse del concurso de acreedores que convocó en 2013. Tras cerrar casi el 50 por ciento de sus establecimientos y despedir a más del 20 por ciento de su plantilla, la firma de moda se centra ahora en firmar el convenio de acreedores para liquidar los pagos de deuda a largo plazo y retomar su estrategia de expansión en España y Portugal.

La que fuera una de las principales marcas españolas de venta de calzado al por menor sufrió en 2013 los estragos de la crisis en el sector de la moda que ha conseguido acabar con grandes del sector como la desaparecida Blanco. Con un panorama muy distinto, en 2011 la compañía atrajo la atención de los fondos de riesgo, para acabar siendo participada con el 49 por ciento de las acciones por el fondo de inversión Atlas Capital. Tras facturar 43 millones de euros en 2012, que llevaron a la compañía a fijar su objetivo en la expansión internacional, Tino González sufrió un duro revés un año después, que abocó a la empresa a acogerse a un concurso de acreedores en diciembre de 2013, cuya finalización estaba prevista para comienzos de 2016.

Tres años y medio después de convocar el concurso de acreedores y tras un duro proceso de reestructuración, se acerca el final de la tutela judicial para Tino González, que reemprenderá su camino con una visión de negocio más reducida pero segura.

De las más de un centenar de tiendas que llegó a tener, en la actualidad mantiene 55, tres de ellas en Castilla-La Mancha, concretamente en Cuenca, Guadalajara y Toledo. Durante el proceso de reestructuración se cerraron varias tiendas de la región, como es el caso de Toledo, donde desapareció la tienda que la marca poseía en el Centro Comercial Luz del Tajo y se mantuvo el Factory del Centro Comercial Puerta de Toledo.

Con el cierre de tiendas desapareció también parte de la plantilla, que pasó de 450 trabajadores a los 350 que tiene hoy en día.

El convenio de acreedores que prepara la compañía contempla un plan de pagos a sus acreedores a largo plazo y un plan de viabilidad con un crecimiento moderado de entre el 1 y el 2 por ciento para este año.

En la nueva etapa que comienza, Tino González se centrará en adecuar el tamaño de la compañía a la realidad económica, para no volver a caer en una expansión demasiado acelerada en un entorno de crisis del sector. Por otro lado, la nueva estrategia apunta hacia una mayor diversificación, con nuevas colecciones de textil y complementos.

Por el momento, la firma de calzado ha puesto en marcha un establecimiento en el centro comercial Sambil Outlet en Madrid y otro en el complejo granadino Serrallo Plaza y tiene prevista la apertura de un punto de venta en la localidad turística de Portimao, al sur de Portugal.

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