Los últimos estudios de Funcas mantienen el aumento del PIB de nuestra Comunidad en el 2,5 por ciento, frente al 3,1 alcanzado en 2016. El resultado del año pasado estuvo por debajo de lo que los expertos esperaban. De hecho el BBVA había situado la posibilidad de crecimiento del PIB regional para el año pasado en el 3,6.
Respecto al escenario actual, el ejecutivo autonómico considera que existe un buen comportamiento de creación de empresas, evolución del empleo, las exportaciones, el turismo. El consejero de Hacienda se ha remitido al índice de confianza empresarial para el tercer trimestre. Los empresarios castellano-manchegos son optimistas y su confianza está diez puntos por encima de la media nacional.
Por su parte, los datos de la Autoridad Independiente de Responsabilidad Fiscal (AIReF) sitúa el crecimiento regional interanual en el 2,4 por ciento al final del primer trimestre, lo que confirma la desaceleración. Las previsiones de la AIReF para 2017 eran las más optimistas al marcar las posibilidades de crecimiento en 2017 en el 3 por ciento, tal y como quedo recogido en el informe económico y financiero elaborado por el gobierno regional para 2017, en el que el ejecutivo mantenía que la economía regional crecería este año una o dos decimas por encima de la media nacional.
Paralelamente, los informes revelan que la desaceleración prevista para el conjunto de España se suaviza, hasta el punto de que se establece que puede llegar a la estabilización del crecimiento igualando la tasa registrada en 2016 o incluso superarlo. De hecho, el servicio de estudios del BBVA ya ha situado el aumento del PIB nacional en el 3,3 por ciento, y el FMI y el Banco de España en el 3,1. En 2016 se alcanzo la tasa del 3,2
El pasado año, mejoraron las exportaciones, pero la balanza comercial empeoró por un fuerte crecimiento de las importaciones. Esa tendencia ha continuado durante el primer trimestre, donde el deterioro fue del 5,8 por ciento, a pesar del crecimiento del 16,6 por ciento de las exportaciones. Funcas apunta que “al inicio de 2017 se advierte una importante remontada en sus indicadores de actividad industrial (que casi no creció en 2016), destacando especialmente la positiva evolución de las exportaciones, aunque estas tienen poco peso en su PIB. La construcción y los servicios, por el contrario, han moderado notablemente su ritmo de crecimiento, en el primer caso debido sobre todo a la agudización de la caída de la obra pública. En el caso de los servicios, la ralentización ha sido una de las más acusadas de entre todas las comunidades autónomas”.
Las previsiones de los economistas consultados por clm21.es sobre las perspectivas de nuestras exportaciones apuntan a que existirá un buen escenario con la recuperación del comercio mundial. En esa coyuntura, el crecimiento de las ventas en el exterior de los productos agroalimentarios, que constituyen el motor exportador de Castilla-La Mancha, podría estar limitado.
El informe de Funcas concluye que “en suma, su economía en 2017 se desacelerará ligeramente más que la media nacional, hasta registrar un 2,5%. La tasa de paro manchego se reducirá en 2017 en casi dos puntos porcentuales, algo menos que la media nacional, hasta el 21,7%”. A falta de una semana para que se de a conocer la Encuesta de Población Activa (EPA), los datos del Ministerio anticipan una bajada del paro hasta finales de junio. No obstante, la tasa regional de paro a final del primer trimestre se situaba en el 27,72 por ciento y la nacional en el 20,51.
Por su parte, el BBVA señala que la evolución de las exportaciones y la mayor actividad de la construcción residencial tiran hacia arriba las previsiones de crecimiento en España, lo que le ha llevado a revisar las previsiones de aumento del PIB nacional al alza, desde el 2,7 al 3 por ciento.
En el caso de nuestra Comunidad, el BBVA destaca el aumento de visados de obra. Sin embargo, el reciente estudio de Servihabitat que publicó clm21.es señala que el fuerte stock de vivienda (55.811 viviendas) y la escasez de la demanda mantienen paralizados el sector de la construcción en nuestra Comunidad. De hecho, en 2017 el estudio sitúa a Castilla-La Mancha como la segunda región española donde porcentualmente se iniciarán menos viviendas, con una tasa de variación del 3,3, cuando la media nacional se situará en el 15,3.
El comportamiento más dinámico de nuestra economía lo protagoniza el sector turístico, que como señala el BBVA “sigue mostrando una fuerte resistencia a la desaceleración”. De hecho, como ha informado clm21.es “Castilla-La Mancha registró durante el mes de junio 46.837 trabajadores de alta en la seguridad Social en los epígrafes de Alojamiento Turístico, Restauración y Agencias de Viaje, lo que supone un 5,7% más que en el mismo mes de junio de 2016”. Además, las ventas de alojamiento turístico en el segundo trimestre de este año han aumentado por encima de las del año pasado en las mismas fechas. Así lo indica una encuesta de Exceltur que asegura que un 71,8 por ciento de los empresarios castellano-manchegos de alojamiento turístico encuestados declaran que sus ventas del segundo trimestre de 2017 han estado por encima del volumen correspondiente al mismo periodo del año anterior. Castilla-La Mancha se convierte en la tercera comunidad autónoma con mejor resultado en este indicador, solamente por detrás de la Comunidad de Madrid, con un 79,1 por ciento y Galicia con un 75,4 por ciento.
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