La deuda de nuestra Comunidad supone el 0,36% del PIB mientras que la del conjunto de Regiones se sitúa en el 0,30%. Castilla-La Mancha es superada por Cataluña (0,42% de su PIB), Baleares (0,41%) y Comunidad Valenciana (0,39%).
De los 177 millones en facturas de Castilla-La Mancha que están en gestión y pendientes de pago, 120 proceden del sector sanitario.
Hace un año, en junio de 2022, el volumen de facturas pendientes de la Junta sumaba 78,9 millones de euros, casi 100 millones por debajo de la actual. Una de las causas del incremento es una mayor agilidad en la gestión de los procesos de compra y de las inversiones durante la primera mitad de este año, que ha coincidido con periodo electoral. Los 177 millones de junio suponen la cifra acumulada más alta a final de mes durante este año y también la más elevada de un mes de junio de los últimos años.
Además de esa deuda comercial, la Junta mantiene pendiente de libramiento otros 288 millones de euros a beneficiarios de convenios, ayudas, subvenciones y otras transferencias, con lo que la deuda no financiera de la Comunidad se sitúa en los 465 millones de euros (0,94% del PIB regional). En total, las Autonomías tienen una deuda no financiera de 11.696 millones de euros, equivalente al 0,83% del PIB nacional.