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El ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, durante la presentación del Proyecto de Ley de los Presupuestos Generales del Estado.
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El ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, durante la presentación del Proyecto de Ley de los Presupuestos Generales del Estado. (Foto: Congreso de los Diputados)

Pensiones, salario de funcionarios y mejora de la financiación autonómica, pendientes de la moción de censura

lunes 28 de mayo de 2018, 11:40h
La precipitada moción de censura presentada por Pedro Sánchez puede tener incidencia en la financiación de la Comunidad Autónoma, en la medida en que pueda llegar a decaer el proyecto de ley de Presupuestos, aprobado por el Congreso, pero en trámite parlamentario en el Senado, donde mañana se constituye la ponencia que ha de informar el Proyecto de Ley de Presupuestos Generales para 2018 y donde está previsto que queden aprobados el 19 de junio.
La subida salarial a los empleados públicos pactada con los sindicatos y que mejora las retribuciones previstas por el gobierno de Castilla-La Mancha para los funcionarios de la región y el incremento de los fondos para financiar la Comunidad, son dos de las cuestiones que pueden quedar en el aire si la moción de censura sale adelante antes de que se aprueben los presupuestos.

A nivel general, también se vería afectada la subida de las pensiones conforme al IPC (Índice de Precios al Consumo), en lugar del 0,25%, lo que afectaría a 269.746 pensionistas de nuestra Comunidad. El proyecto contempla el incremento del 3% en las no contributivas, el mismo porcentaje está previsto para las pensiones mínimas.

Además el proyecto de ley todavía en trámite contempla una inversión de 589,5 millones de euros en Castilla-La Mancha. También se vería afectado el inicio del proceso equiparación salarial de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado y varias medidas de empleo público como la tasa de reposición del 100%.

De prosperar la moción de censura antes de que el Senado apruebe el proyecto de ley y de que el Congreso convalidase las posibles modificaciones en el Senado, el gobierno entrante debería iniciar la tramitación de un nuevo presupuesto, que debería pactar con las fuerzas parlamentarias. Para que el presupuesto no estuviese aprobado antes de la moción de censura bastaría que se incluyese alguna modificación en la Cámara Alta o que se modificase su calendario de tramitación, algo que no está en las manos del partido que ha presentado la moción de censura, el PSOE, y sí del Partido Popular, que tiene mayoría en el Senado.

En caso de que los presupuestos quedasen aprobados definitivamente antes de que se realizase la moción de censura, el gobierno ya sea el actual o el que saliese como consecuencia de que hipotéticamente prosperase la moción de censura, tendría que gestionar el proyecto ya aprobado.
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