En la tasa de variación anual del IPI regional destaca la influencia negativa de la industria de bienes de equipo, que redujo su producción en un 9,5%, así como la energía retrocedió un 6%.
El resto de sectores industriales presentan una tasa de variación anual de producción positiva, que va desde el 0,6% de los bienes intermedios hasta el 8,1% de los bienes de consumo no duradero.
El frenazo en la activdad de las industrias tiene su origen en los problemas de abastecimiento que afectan al sector manufacturero a nivel mundial. El coste de la energía, el encarecimiento de las materias primas, las dificultades, retrasos y costes más elevados de los procesos de exportación y el atasco en los puertos de los contenedores comienza a reflejarse en las cifras de producción.
En clave nacional la producción industrial subió en octubre en cinco comunidades autónomas en tasa interanual y disminuyó en once regiones, principalmente en Castilla y León (-15,8%), Aragón (-11,7%) y La Rioja (-6,8%). Los únicos incrementos interanuales de la producción se registraron en Baleares (+22,5%), Asturias (+6,3%), Andalucía (+1,8%), Canarias (+1,3%) y País Vasco (+1%).
Con la caída interanual de octubre, la producción industrial pone fin a siete meses consecutivos de tasas positivas.
Por sectores, los mayores recortes de la producción se los anotaron los bienes de equipo (-11,7%) y los bienes intermedios (-3,5%), seguidos de los bienes de consumo duradero (-2,1%). Sólo incrementaron su producción en octubre los bienes de consumo no duradero (+2,5%) y la energía (+0,4%).