IDIS ha anunciado que va a proponer reuniones con cada uno de los responsables sanitarios autonómicos para trasladarles esa propuesta con la que se pretende dejar a cero las listas quirúrgicas de toda España, que en la actualidad superan los 600.000 pacientes. Según los cálculos de IDIS esa medida costaría a las arcas autonómicas 1.500 millones de euros. El sector privado aportaría sus profesionales, sus 450 hospitales y más de 50.000 camas.
El gobierno regional ya ha apostado por las derivaciones sanitarias para tratar sin éxito de controlar el aumento desbocado del número de pacientes en espera de ser intervenidos
Según viene informando clm21.es, la lista quirúrgica se ha convertido en el principal problema sanitario de Castilla-La Mancha. El deterioro del sistema público ha hecho crecer la lista hasta alcanzar los 36.609 pacientes (datos a 31 de julio), de ellos 12.880 con tiempos de espera que superan el medio año. Todo ello, a pesar de que durante el presente año el ejecutivo de Emiliano García-Page ha tratado de frenar el aumento de la lista mediante el incremento de la derivación de pacientes a las clínicas privadas.
El gobierno regional ha apostado por los tratamientos en clínicas privadas como demuestra el hecho de que a finales de julio hubiera consumido las partidas para las derivaciones a centros privados mientras había congelado la contratación de personal sanitario en el servicio público de la Comunidad.
De hecho, a finales de julio ya había agotado y superado los 6,96 millones para operaciones de cardiología en clínicas privadas, a las que había pagado 7,5 millones de euros. En intervenciones de cirugía general, el gobierno socialista de la Comunidad había pagado a las clínicas privadas 3,82 millones de euros de los 4,41 que tiene para todo el año. En cambio sólo se había gastado el 30 por ciento para la contratación de médicos en el servicio público de salud y el 43 por ciento para personal de enfermería.
La propuesta forma parte de un proyecto nacional que la sanidad privada quiere acordar con las autoridades sanitarias que costaría 1.500 millones de euros
Dejar la lista quirúrgica de Castilla-La Mancha a cero supondría un coste en torno a los 90 millones de euros. La estrategia del gasto del gobierno regional se dirige actualmente a reducir el número de pacientes en las otras dos listas: la de atención por un especialista y la de pruebas diagnósticas. Para mejorar estas, además de las derivaciones a centros privados el gobierno quiere llevar a cabo un programa de renovación del material tecnológico. Además el gobierno se va a beneficiar de la donación recibida de la Fundación Amancio Ortega (el dueño de Inditex). En la estrategia a corto, el gobierno ya había consumido en julio los fondos destinados a algunas pruebas diagnósticas en clínicas privadas.
Los datos de la sanidad privada en CLM
Según los datos de 2015 el sector hospitalario privado representaba el 32% de los hospitales de la región. Sus 9 centros tienen el 8% de las camas (472 de las 5.719 contabilizadas). El sector público tiene 5.247 camas en 19 centros. De los 9 hospitales privados, 4 son del gigante fusionado IDC, que además tiene una clínica.
De las 472 camas privadas en esos 9 hospitales, 228 son médico-quirúrgicas, 234 generales y 10 de traumatología y rehabilitación. Durante el último año las quirúrgicas han disminuido en 19 y las generales han aumentado en 15. El sector público tiene 5.247 camas (el 92%), aunque no todas están operativas, debido a la política de cierre de plantas.
En cuanto a equipamiento tecnológico, el sector privado tiene su mayor fortaleza en los densitómetros óseos, tiene 2 de cada tres que hay instalados en la Comunidad. En resonancias magnéticas, las privadas tienen el 48 por ciento de los aparatos frente al 52 por ciento de los centros públicos. En total hay 21 aparatos. Tiene 1 de cada tres gammacámaras y mamógrafos y 1 de cada 4 aparatos de tomografía por emisión de fotones.
La sanidad privada carece en la región de la siguiente tecnología: tomografía por emisión de positrones, litotricias por ondas de choque, aceleradores de partículas, agiografos por sustracción digital y equipos de hemodiálisis.
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