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El apoyo financiero del gobierno central ahorró a CLM 803 millones en los dos últimos años
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El apoyo financiero del gobierno central ahorró a CLM 803 millones en los dos últimos años

martes 19 de diciembre de 2017, 21:41h
El apoyo financiero del gobierno central a la Comunidad Autónoma ha permitido a Castilla-La Mancha ahorrar 1.277 millones de euros en intereses por sus créditos desde 2012. La mayor parte de esta cuantía, 803 millones, corresponde a los dos últimos años. Ese ahorro se produce por la diferencia de los tipos de interés del mercado y los verdaderamente aplicados por el Ministerio en los préstamos concedidos al gobierno regional para dotar de liquidez a la Junta. Si Castilla-La Mancha acudiera al mercado para financiar sus presupuestos tendría muy difícil su captación y si lo hiciera sería a intereses desorbitados, dada la fragilidad financiera de la Comunidad.

Los datos forman parte del informe elaborado por el profesor Ángel de la Fuente, director ejecutivo de la Fundación Española de Economía Aplicada (FEDEA) “Los mecanismos adicionales de financiación: cantidades desembolsadas, subvenciones a los intereses y efectos sobre la financiación efectiva de las Comunidades Autónomas”. En ese informe, el catedrático aplica al ahorro lineal la bajada de tipos de mercado que se ha ido produciendo en los últimos años.

Este ahorro habría supuesto a Castilla-La Mancha según los cálculos realizados por Ángel de La fuente, a partir de los datos de 2015 una mejora de su financiación en un 3,2%, por detrás de Cataluña y Valencia que la habrían visto mejorada en más de un 5%.

De la Fuente parte de que “durante la reciente crisis, las comunidades autónomas se han encontrado con dificultades crecientes para acceder a los mercados de crédito con el fin de financiar sus vencimientos de deuda o sus déficits actuales y han recurrido a aplazar los pagos a sus proveedores, trasladando así sus problemas de liquidez a numerosas empresas. Ante esta situación, el Gobierno central ha actuado como prestamista de última instancia, facilitando a las comunidades autónomas liquidez en condiciones muy ventajosas a través de distintos fondos de nueva creación y otros mecanismos, entre los que se incluyen los sucesivos alargamientos del período de devolución de los saldos deudores de las liquidaciones de 2008 y 2009 y otras medidas ad-hoc.”.

En el caso de Castilla-La Mancha el anterior gobierno del Partido Popular se encontró a su llegada con facturas sin pagar a proveedores guardadas en los cajones por sus predecesores por más de 4.000 millones de euros, por lo que tuvo que acudir al Ministerio buscando el apoyo financiero para poder atender la deuda comercial heredada. El gobierno actual se ha mantenido bajo el paraguas financiero del Ministerio.

En la actualidad los fondos se destinan a refinanciar la deuda, pagar a proveedores y cubrir el déficit anual. Según los datos del estudio que cita fuentes del Ministerio de Hacienda, Castilla-La Mancha habría recibido del Estado préstamos por importe de 10.738 millones de euros, de los que a finales del año pasado tendría pendiente de devolver 9.844 millones.

De la Fuente pone en valor que “las condiciones de los préstamos de los distintos mecanismos de liquidez han sido muy favorables. Así, el tipo de interés del primer tramo del Mecanismo de Pago a Proveedores estaba en torno al 6%, con una prima de menos de punto y medio sobre el coste de los fondos para el Tesoro Público, en un momento en el que el coste de la financiación para las CCAA con acceso al mercado estaba en torno al 11% en el mejor de los casos. En ejercicios posteriores los tipos iniciales han Ido cayendo al mejorar las condiciones de mercado y además el Gobierno ha reducido varias veces los tipos aplicables, tanto para los préstamos nuevos como para los ya concedidos, hasta llevarlos a niveles de entre el 0% y el 1% anual en 2015 y 2016.”

La mayoría de las operaciones vivas que tiene Castilla-La Mancha se encuadran dentro del Fondo de Liquidez Autonómica (FLA). Por este mecanismo es el Estado el que en primera instancia capta recursos en el mercado para después ofrecer préstamos a las comunidades autónomas.

Como recuerda De la Fuente “el acceso a los mecanismos de financiación se condicionó a la presentación y aprobación de un plan de ajuste y al cumplimiento de los objetivos de estabilidad presupuestaria previstos en el mismo. También se exigió a las comunidades autónomas beneficiarias que suministrasen mensualmente al Ministerio de Hacienda información detallada sobre el estado y evolución de sus finanzas para permitir el seguimiento de sus planes de ajuste. En ambos casos, la devolución de los préstamos se garantizaba con los recursos del sistema de financiación autonómica, que serían retenidos por el Ministerio de Hacienda en caso de incumplimiento del calendario de amortización acordado”.

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