En el último trimestre del año, el número de personas desempleadas en la región bajó en 22.700, un 14,52% menos. El número de ocupados al término del año pasado se situó en Castilla-La Mancha en 869.700, dejando una variación anual de la ocupación del 5,81%, la tercera más alta del país tras Canarias (13,36%) y Murcia (6,14%) y casi 1,5 puntos por encima de la media del país. Por su parte, la tasa de actividad se sitúa en el 59,09%.
A nivel nacional, el paro bajó en 615.900 personas en 2021, lo que supone un 16,5% menos que en 2020 y su mayor reducción anual desde 2015, mientras el empleo creció en 840.700 puestos de trabajo (+4,3%), la cifra más alta en 16 años, reflejando así la recuperación del mercado laboral tras el estallido de la pandemia en 2020, año en el que se registraron los peores datos de paro y ocupación desde 2012.
La bajada del paro en 2021 supone la vuelta a los descensos después de que la crisis desatada por la pandemia de Covid-19 llevara a una subida del paro en 2020 de casi 528.000 personas. En el caso de la ocupación, también se retoma la senda alcista tras un 2020 en el que se destruyeron 622.000 puestos de trabajo.
Como curiosidad, el INE refleja el impacto de la pandemia sobre las formas de abordar el trabajo a las que nos ha llevado la pandemia. Así, los datos del cuarto trimestre reflejan un repunte del trabajo desde casa, fundamentalmente por el trabajo ocasional. El 7,9% de los ocupados trabajaron desde su propio domicilio más de la mitad de los días y el 5,7% lo hizo, pero con menor frecuencia, frente al 8,0% y 4,7%, respectivamente, del tercer trimestre de 2021.